Cómo continuar con la vida tras la muerte de un ser querido

Puede parecer imposible, seguir adelante sin la presencia, el calor y las palabras de quién se ha ido. Pero no lo es. Ciertamente, el fallecimiento de un ser querido es un momento complicado y duro para las familias y a nivel individual. Algunas personas son capaces de gestionarlo sin ayuda, pero otras, requieren de un soporte que les guíe para evitar que esta situación derive en patológica. En cualquier caso, seguir adelante es siempre posible y mucho más fácil en un entorno de soporte y de ayuda. 

Plenamente consciente de la importancia de gestionar la muerte y prevenir los duelos complicados, Áltima ha establecido una amplia red de colaboradores, profesionales y entidades que orientan a las personas que pasan por un proceso de defunción, ofreciéndoles apoyo emocional experto y otras herramientas de ayuda ante la pérdida de forma totalmente personalizada.

Acompañamiento durante el duelo

Uno de esos pilares de soporte se halla en la psicóloga Begoña Odriozola, de SIPS (empresa con la que Áltima colabora) que afirma que: “El duelo no debe superarse porque no es una enfermedad. Es esa pena, a veces profunda, a veces insondable, que emerge cuando perdemos a un ser querido y, con ello, también nuestra vida cambia. Pasamos por ello y, un día, descubrimos que hemos encontrado la manera de vivir con la persona, de otra manera, sintiéndola en el interior pero sin la sensación de desgarro. Lo que es importante saber es que no hay recetas estándar. El duelo es un camino personal y consiste en encajar y hacer compatible las necesidades de cada uno en cada momento particular”. 

De acuerdo con esta visión y sabiendo, por la experiencia acumulada, que el dolor de la perdida es superable, desde Áltima se destaca la necesidad de empatizar lo que sea necesario para que las familias que están pasando por un proceso de este tipo, se sientan comprendidas, atendidas, escuchadas y, al mismo tiempo, se puedan despreocupar de las gestiones que hay que llevar a cabo. 

El acompañamiento a las familias constituye la base del servicio de esta empresa funeraria, que está al lado de las personas dándoles tranquilidad, intentando que encuentren cierto alivio en un momento delicado y, de este modo, comiencen a integrar la pérdida en su día a día, de la mejor manera posible. 

Apoyo en la toma de decisiones

En este escenario, según informa Inma Batista, responsable de Asesores en el Tanatori Ronda de Dalt de Barcelona : “Hay un tipo de defunciones inesperadas o de origen traumático que nos resultan especialmente difíciles de tratar. Desde Áltima intentamos transmitir calma, facilitando una atención personalizada y asesorando en todo el proceso que además suele ser desconocido para la mayoría de estas personas. Damos prioridad a aquellas inquietudes del familiar, como puede ser, ver lo antes posible a su ser querido, que les asesoremos en las opciones de entierro o incineración. Nuestras familias valoran el acompañamiento, sentirse guiadas durante todo el tiempo que ha durado el sepelio. Cuando hay una petición especial en la organización del funeral o en la preparación de su ser querido, son siempre muy agradecidas. También que nos anticipemos a sus necesidades ofreciendo los diferentes servicios como por ejemplo, ayuda psicológica en la sala de velatorio, ceremonias al aire libre, y la creación de productos sostenibles como la composición floral, planta viva”.

Entorno de soporte y herramientas de ayuda

Áltima cuenta también con servicios como apoyo telefónico, acompañamiento presencial o grupos de ayuda mutua al duelo, formados por personas que comparten el mismo tipo de pérdida, como puede ser la de un hijo, un padre o la pareja. Por otro lado, también para facilitar el paso por el proceso de la pérdida, Áltima dispone de Plataforma Duelo, un servicio de librería especializada, integrada por diversos títulos relacionados con esta temática. 

Los libros de apoyo han sido escritos por reconocidos expertos en la materia, y se convierten en herramientas de gran ayuda en todo el proceso de asimilación de la muerte del ser querido.

Estos servicios y otros puestos en marcha por Ältima se complementan para atender las distintas necesidades emocionales de las familias, pero también son recursos accesibles para el personal funerario de la empresa siempre que sea preciso.

Espacios para homenajear las muertes perinatales

La iniciativa ‘La Caja de los Recuerdos’, que cuenta con el apoyo de Áltima, nació de la mano de un grupo de madres y padres que perdieron a sus hijos prematuramente. Actualmente, está en funcionamiento en numerosos centros hospitalarios de Catalunya. Las familias reciben en el hospital de forma gratuita una caja elaborada por la asociación para que puedan guardar recuerdos del bebé como su ropa, su huella o la pinza del cordón umbilical.

La caja ayuda a las familias en un momento difícil, tanto a nivel físico como emocional. Contienen una manta y otros elementos como un libro, una vela, botes de cristal, postales y peluches. También se ofrece la opción a la familia de poderse hacer fotografías dulces y agradables que perduren como recuerdo. Se trata de una herramienta para comenzar a trabajar la pérdida del bebé. La caja es un inicio de este proceso, que puede comportar diversos tiempos dependiendo de cada familia. Las pérdidas gestacionales, perinatales y neonatales comienzan a ganar visibilidad.

En el caso de Áltima, desde el año 2019 ha proyectado siete espacios dedicados al recuerdo de estas pérdidas en el Cementiri Comarcal de Roques Blanques, en El Papiol; Sant Cugat del Vallès, Castellar del Vallès, Sant Pere de Ribes, Sant Just Desvern, Sant Vicenç dels Horts y Ripoll además de tener otros previstos próximamente en El Prat, Viladecans y Vilanova i la Geltrú. El propósito es ayudar a las familias a superar uncon el propósito de ayudar a madres y padres, a superar el difícil duelo.

Dignificar al difunto

Después de unos años muy difíciles por la pandemia, cuando había que seguir un protocolo especial si el difunto tenía Covid y no estaba permitido realizar determinadas acciones de acondicionamiento, actualmente es posible tratar su cuerpo y que la familia pueda velarlo adecuadamente, porque despedirse es fundamental y emocionalmente necesario, pues es parte del ritual y del proceso de duelo.

Las tareas para condicionar al difunto son un elemento importante dentro del ciclo funerario y, también, un aspecto muy valorado en la actualidad. Este trabajo lo realizan los tanatopractores, formados específicamente para poder preparar el cuerpo del difunto. Se encargan de realizar esta delicada tarea, que puede conllevar desde pequeños retoques estéticos hasta otros procesos más complejos, como el embalsamamiento. 

Para mejorar el aspecto del difunto se recurre a técnicas muy específicas que hacen posible que la última imagen del difunto sea más agradable. En Áltima todo el equipo está especialmente calificado y dispone de formación funeraria, así como de gestión del duelo, que les permite actuar oportunamente ante situaciones complejas. 

A la hora de realizar el ritual funerario, otro aspecto fundamental es la ceremonia, que cada vez son más participativas y personalizadas, incorporando elementos como textos o proyección de imágenes de la vida del difunto.

Estar cerca de las personas

El compromiso de Áltima está íntimamente ligado a la estrategia de ofrecer servicios cercanos a las personas e instituciones más próximas, aportando beneficios a su entorno geográfico, colaborando con las entidades locales y maximizando su valor social.  En este escenario, las últimas acciones de Áltima se han concentrado en el Tanatorio Alt Camp, que amplía su presencia en la provincia de Tarragona. El equipamiento, situado en el Polígono Industrial de Valls, representa una alternativa de servicios funerarios.

Se ha puesto en marcha en Girona capital, en el polígono Mas Xirgu, se abrió el pasado año el nuevo Tanatorio-Crematorio Áltima Gironès, con servicios funerarios abiertos a toda la ciudadanía, ampliando la cobertura de la empresa funeraria en tierras gerundenses. Como novedad, el centro de Girona ofrece un servicio pionero, también presente en el tanatorio de Terrassa, basado en la tecnología de realidad inmersiva que proyecta imágenes en 3D acompañadas de música en el momento en que el féretro se encuentra a punto de ser incinerado. Destacar, asimismo, el tanatorio de Manresa en la capital del Bages que se renovó para acoger cinco salas de velatorio, más amplias y equipadas con todos los servicios, oficinas y un parking público cubierto.

Actualmente, Áltima también está construyendo un nuevo tanatorio en Sant Joan de les Abadesses, que prevé finalizar en diciembre.