Directores de escuelas ven una "chapuza" el plan de Educació para ajustar la hora lectiva

Absolutamente toda la comunidad educativa coincide en que la medida acordada entre sindicatos y Departament d'Educació que puso fin a las huelgas y permitió a los docentes reducir una hora lectiva es buena. Hay unanimidad en que incrementar la plantilla docente -finalmente se contratarán 3.566 maestros- es algo positivo para la escuela pública catalana -lo sorprendente sería opinar lo contrario-, pero, a ojos de un gran número de direcciones, hacerlo ahora -en enero- y así -a salto de mata- podría perjudicar a los alumnos más que beneficiarles, algo a lo que no están dispuestos.

"Lo que nos están proponiendo es una chapuza y, en lugar de ser comprensivos con los centros, con lo que nos encontramos es con amenazas de que nos denunciarán si no lo cumplimos", señala contundente Josep Oriol Rodon, del instituto Joncar, en Barcelona, uno de los directores que ha decidido no rehacer los horarios. 

En su caso, como en muchos centros, la dirección ha reunido al claustro y al Consell Escolar para exponerle la situación e intentar sortear el asunto con los mínimos perjuicios, pasando, por ejemplo, horas de coordinación, hasta ahora marcadas como lectivas, a no lectivas; la manera de cumplir el acuerdo sin cambiar el horario a los chavales y al profesorado. Solución, eso sí, que tiene que contar con el visto bueno de los profesionales afectados, algo que en gran medida está sucediendo.

Muchos profesores coinciden con Rodon en el "descalabro enorme" que supone el cambio a mitad de curso. Muchos profesores opinan que "no les sale a cuenta" ceder una hora de una asignatura a otro profesor para después tener que estar coordinándose con este para ver qué han hecho y qué no en clase, cómo evaluar al alumnado o saber si avanzan igual que los otros grupos.

Falta de soluciones

El Departament de Josep Gonzàlez-Cambray plantea, para ajustar horarios, pasar las medias jornadas a jornadas completas, y que esas horas de más se utilicen para ofrecer apoyos. Los directores consultados por este diario ven el documento "hasta ofensivo" por la obviedad de lo que se plantea y la falta de soluciones concretas. "Un refuerzo siempre es positivo, pero se le podría sacar mucho más partido de forma planificada", concluye el director de El Joncar.

Entre las propuestas organizativas que sugiere el polémico documento para que las direcciones de los centros puedan hacer efectiva la reducción de una hora lectiva a los docentes, destaca "redistribuir las horas lectivas de patio" o "redistribuir las horas de codocencia en franjas globalizadas".

En el apartado "qué se puede pedir", referido a los profesores que las direcciones pueden reclamar para sustituir las horas de menos que hará la actual plantilla, el documento señala por un lado que "hay que priorizar las medias jornadas ya asignadas al centro y pasarlas a jornada completa", y, por el otro, que las sustituciones pasen a cubrir las vacantes para el resto del curso. "Se pueden proponer especialistas a media jornada en el caso que sea imprescindible", añade el documento. La cuestión de los especialistas ha sido siempre la más espinosa, principalmente en secundaria, ya que, por ejemplo, ¿qué otro docente puede hacer la hora que deje de hacer el profesor de Latín?

Las instrucciones también señalan que "hay que velar para que la redistribución de materias implique los mínimos cambios en el equipo docente de cada curso". En materias que impartan dos docentes, "hay que velar por la coordinación entre ellos" y "tener en cuenta todas las especialidades que tiene reconocidas el personal docente".

"Ante cualquier duda en relación a la petición de especialidades, dobles especialidades y provisión, hay que contactar con el servicio del personal docente de vuestro Servicio Territorial o Consorcio", zanjan el documento.

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