Barcelona apuesta por una escuela de proximidad en todos los barrios de la ciudad

Aumentar la oferta pública e impulsar una educación de proximidad son algunas de las propuestas clave del nuevo Acord de l'Educació del Ayuntamiento de Barcelona. Este acuerdo pretende abordar las necesidades educativas y utilizar la escuela como un agente de igualdad e inclusión para todos los alumnos de la ciudad. La escuela de proximidad es uno de los grandes retos que afronta el ayuntamiento en el nuevo acuerdo, por ello apuestan por incentivar a las familias a llevar a sus hijos a los centros de su barrio y de esta manera apostar por una educación de proximidad. Incrementar la oferta de educación pública y reducir la segregación escolar con una distribución equilibrada de los alumnos en situación de vulnerabilidad social son otros de los puntos clave. Con estas nuevas bases, el ayuntamiento pretende luchar por una escuela inclusiva, equitativa y de calidad para todos los alumnos de la ciudad.

Universalización de la educación de 0 a 18 años

Uno de los puntos clave de las nuevas políticas educativas para la ciudad es el refuerzo de la educación en todas sus etapas. En la etapa de 0 a 3 años el ayuntamiento se compromete a ampliar el número de escuelas infantiles y el número de plazas públicas para así llegar a acoger a un mínimo de 11. 000 alumnos en lugar de los 8.500 que se acogen actualmente. O sea, incrementar del 83% al 90% el nuevo alumnado de P3 que se matricula en un centro de la zona educativa en que se reside. Además, la ampliación del número de escuelas infantiles públicas que pasarán de las 103 actuales a 125, un aumento significativo pero poco ambicioso para la necesidad de la ciudad.

El objetivo en este ámbito es que la educación de 0 a 3 sea universal y accesible a todos los niños de la ciudad. Pau Gonzalez, concejal de Educació de Barcelona en Comú, ha remarcado la importancia del pacto en esta etapa, haciendo especial mención en que ayudará no solo al aumento de plazas públicas, sino también a hacer más inclusiva esta etapa educativa. "Hay una demanda muy fuerte de una escuela infantil pública. Con este pacto no solo abordamos esta necesidad, también la de hacer esta etapa más inclusiva. También hemos incorporado mecanismos de seguimiento para que la propuesta de la Generalitat de que el curso de P2 sea gratuito sea efectiva y que al final esta propuesta crezca en toda la etapa de 0 a 3". Otro de los objetivos es pasar del 46% actual a un mínimo del 60% de los niños y adolescentes del segundo ciclo de educación infantil a la ESO que estén matriculados en escuelas públicas.

En cuanto a la etapa de 16 a 18 años se apuesta por reforzar el interés de los alumnos para continuar formándose y así luchar contra las diferentes formas de abandono en esta franja de edad. Con esto se pretende garantizar la igualdad de oportunidades entre los alumnos de la ciudad. El ayuntamiento, además, se compromete a garantizar la gratuidad efectiva de la escolarización a todo el alumnado en situación de vulnerabilidad en la franja de 2 a 18 años. 

Más allá de la escuela

Los ejes de actuación de este plan educativo del ayuntamiento de Barcelona, no sólo se aplican en las aulas, si no que pretende ir más allá incorporando mejoras en todos los ámbitos educativos. En cuanto a la oferta educativa, el plan prevé aumentar la oferta de formación profesional en la ciudad para así proporcionar una oferta más amplia en la etapa postobligatoria. Otro de los puntos clave es garantizar la vinculación de los centros educativos con los equipamientos científicos y culturales de la ciudad y reforzar las extraescolares convirtiéndolas en una opción variada, asequible y de calidad para todos los niños y jóvenes de Barcelona. La escuelas de adultos, las ponen por primera vez en el centro para garantizar que sea una oportunidad para toda la ciudadania eliminando las desigualdades de acceso que limitan una participación formativa mas plena e inclusiva.

Un documento de consenso

Este documento marca la estrategia de un modelo que se basa en una educación inclusiva, equitativa y de calidad y tiene como meta el año 2030. Este documento, que lleva trabajándose desde mayo de 2021, ha contado con la participación de más de 170 personas, cosa que hace que sea un pacto con un amplio consenso social. Gemma Sendra, concejala de ERC de educación, ha celebrado las bases del acuerdo y ha comentado la importancia de poner el foco en mejorar las desigualdades a través del estudio de los diferentes territorios y etapas educativas. "Tenemos actualmente problemas sociales graves y creemos que la educación es uno de los principales agentes para avanzar. Es un pacto compartido y muy amplio que se basa en que Barcelona tenga una equidad educativa", ha sentenciado .