La cuatro últimos viajeros que pidieron asilo en El Prat abandonarán el aeropuerto en las próximas horas

 Los últimos cuatro pasajeros palestinos del total de 39 de un vuelo procedente de Egipto con escala en Barcelona que permanecían desde el lunes en el aeropuerto de El Prat para pedir asilo en España saldrán del recinto en las próximas horas tras haberse admitido a trámite sus solicitudes.

Según han informado a Efe fuentes cercanas al caso, A los 39 pasajeros, entre los que hay una mujer nonagenaria y varios menores, muchos de ellos en unidades familiares, ya se les ha dado autorización para poder acceder a territorio español para iniciar los trámites del proceso de asilo.

Este grupo de personas viajaban en un vuelo charter procedente de El Cairo y con destino a Bogotá y Quito, que aterrizó en Barcelona hacia las 11:00 del pasado lunes para hacer escala antes de reanudar su trayecto.

Sin embargo, un total de 39 pasajeros del avión, refugiados palestinos con documentación libanesa, se bajaron del mismo y se negaron a continuar el viaje, alegando que tenían la intención de formalizar una petición de asilo ante las autoridades españolas.

Por este motivo, quedaron alojados en la sala que el aeropuerto de Barcelona dispone para albergar a las personas que tramitan una solicitud de asilo en los controles fronterizos de las instalaciones aeroportuarias, un espacio que dispone de duchas y otros servicios básicos.

A medida que las autoridades han ido efectuando los trámites pertinentes, para comprobar entre otros aspectos su identidad y que detallen los motivos por los que piden el asilo, este grupo de personas ha ido abandonando el aeropuerto y ha pasado a ser atendida por los servicios sociales de la Cruz Roja.

El caso canario

La abogada Elena Martínez, que ha prestado apoyo jurídico a varios de estos inmigrantes, ha subrayado, en declaraciones a Efe, que su caso no tiene nada que ver con el intento de entrar a España de manera irregular que protagonizaron el pasado 5 de noviembre varios pasajeros de un vuelo entre Casablanca y Estambul, que aterrizó en Palma de Mallorca por una falsa emergencia médica.

En el caso del grupo de personas que ha pedido asilo en el aeropuerto de Barcelona, lo han hecho mediante la vía legal y sin amotinarse ni poner en riesgo la seguridad aeroportuaria, según Martínez.