En Castelló d'Empuries

La familia de un conductor de patinete fallecido apunta a la desidia de la policía

Los agentes locales no pasaron a disposición judicial al autor del atropello y lo dejaron en libertad

El conductor del turismo que arrolló al joven iba bebido, chocó con otro coche y se dio a la fuga a pie

Mónica, madre del joven fallecido, y el abogado Daniel Vosseler.

Mónica, madre del joven fallecido, y el abogado Daniel Vosseler. /

J. G. Albalat

J. G. Albalat

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“Manifiestamente irregular”. Así de contundente se expresó este miércoles el abogado Daniel Vosseler al definir la actuación de la policía local de Castelló d’Empúries (Alt Empordà, Girona) que dejó en libertad al autor del atropello mortal de un joven de 19 años que circulaba en un patinete y que no fue puesto a disposición del juzgado para que decidiera si debía ingresar o no en prisión. La familia del fallecido reclamará su encarcelamiento.

El suceso ocurrió sobre las 6 de la mañana del pasado 10 de octubre, cuando José Manuel S. M., de 25 años y vecino de Sant Miquel de Fluvià (Alt Empordà), arrolló con su coche al joven en la Avenida de la Marinada de Castelló d'Empúries cuando regresaba a su casa al acabar su turno en el supermercado donde trabajaba de reponedor. El muchacho falleció un día después en el Hospital Josep Trueta de Girona. El infractor, que conducía bajo los efectos del alcohol, según el atestado policial al que ha tenido acceso EL PERIÓDICO, se dio a la fuga tras cometer el atropello. Embistió a la víctima por detrás, dejándolo malherido en la calzada y a unos metros del lugar del impacto.

José Manuel S. M. se personó más de una hora después ante la policía local de Castelló d’Empúries. Antes había ido a su casa. En las dependencias policiales se le hicieron dos pruebas de alcoholemia. El primer test dio 0,40 y en segundo, 0,38, con lo que estaba "en modo descendente", según los abogados Vosseler y Álvaro Machado. Esta tasa está por encima de lo permitido. A pesar de la gravedad de la situación, la policía local no pasó a disposición judicial al conductor del turismo, sino que dejó sin efecto su detención y lo dejaron en libertad. La familia de la víctima clama porque el autor del accidente continúe conduciendo por las calles como si no hubiera pasado nada.

"Quiero justicia por mi hijo"

 “Quiero justicia por él (su hijo). Si una persona comete un error, tiene que pagar por ese error. No puedes enseñar a la juventud que puedes conducir borracho, sin seguro, omitir el auxilio, entregarte luego y que salgas impune”, aseveró Mónica, la madre de la víctima. “A día de hoy, la anomalía es que (el conductor) sigue libre sin haberse sometido a la justicia, sin que el juez haya decidido si merece continuar en la sociedad o ser apartado por homicidio imprudente. Abandonó el lugar del accidente, circuló bajo los efectos del alcohol y lo hizo con mucho exceso de velocidad”, precisaron los abogados.

Vosseler incidió en que es la primera vez que se encuentra ante “un cúmulo de irregularidades así”. Según explicó, los testigos confirmaron que la víctima resultó proyectada “a 20 metros” y que el conductor del turismo impactó después con otro vehículo, se dispararon los airbags y huyó a pie. El abogado apuntó a una “posible dejación de funciones, teniendo en cuenta la gravedad terrible de los hechos”. Además, criticó que el turismo no quedase en el depósito y que el atestado no contenga una prueba de drogas, por lo que reclamarán a los Mossos que la realicen ahora. Por ello, estima que debe ser este cuerpo policial quien lleve la investigación. “Al cabo de cuatro horas lo dejaron en libertad sin esperar a saber el estado de la víctima”, subrayó el letrado, que no descarta iniciar acciones por dejación de funciones. 

La jueza de guardia de Figueres tuvo conocimiento del accidente el mismo 10 de octubre a través de un informe del centro médico donde fue el joven herido. La magistrada abrió una causa para acumular los datos sobre el siniestro, aunque fue archivada provisionalmente al no recibir más información y para “proteger” que el delito no prescribiera. Posteriormente, con la denuncia de la familia de la víctima y el atestado policial, se reabrió el proceso judicial.

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