Lucha contra la inactividad física

Andar 10.000 pasos al día es una cuestión de salud

Caminar se ha convertido en una prescripción sanitaria para combatir otra pandemia mortal, la del sedentarismo

La OMS recomienda un paseo diario de una hora y media para reducir el riesgo de sufrir enfermedades

reportaje 10.000 pasos al día una cuestión de salud    David Castro

reportaje 10.000 pasos al día una cuestión de salud David Castro / David Castro

Olga Pereda

Olga Pereda

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En una de sus citas médicas, Roger Ebert, el crítico de cine más popular de EEUU (fallecido en 2013 por un cáncer), salió de la consulta con la siguiente receta sanitaria: caminar. A partir de entonces, Ebert se recorría su ciudad cada día, Chicago, con la misma disciplina con la que tomaba sus medicinas. No es un caso aislado. Muchos facultativos prescriben a sus pacientes dar caminatas. No es una pseudoterapia. Es ciencia. Es salud.

Bruselas acaba de lanzar una campaña recordando a los ciudadanos que los pies están disponibles las 24 horas. En Barcelona, y en Madrid de forma más tímida, muchos colegios se han movilizado para pedir entornos peatonales más seguros que no estén dominados por el automóvil. El metro de Bilbao recuerda a los viajeros que subir escaleras en lugar de usar el ascensor es una manera de hacer ejercicio. Mover el cuerpo importa. 

Por más que el dúo cómico Pantomima Full haya hecho uno de sus ácidos y divertidísimos vídeos burlándose de la gente que hace ejercicio simplemente caminando, pasear es sinónimo de bienestar físico. El sedentarismo mata. Lo dice la Organización Mundial de la Salud (OMS), que recomienda dar un mínimo de 10.000 pasos diarios, una caminata, más o menos, de hora y media. A pesar de que entraron en el mercado en los años 90, las pulseras de actividad digitales -podómetros- viven ahora un auténtico 'boom', como las aplicaciones del móvil que cuentan pasos.

La inactividad física constituye el cuarto factor de riesgo más importante de mortalidad en todo el mundo (6% de defunciones a nivel mundial). Solo la superan la hipertensión (13%), el consumo de tabaco (9%) y el exceso de glucosa en sangre (6%). El sobrepeso y la obesidad representan un 5% de la mortalidad mundial. Estos son los alarmantes datos de la OMS, que insta a los ciudadanos a moverse para cuidar su salud. ¿Cuánto? Cómo mínimo 150 minutos a la semana de actividad física moderada o 75 minutos si se realiza de manera vigorosa.

Una persona camina por el paseo del bosque de Encinas de Boadilla del Monte.

La OMS recomienda dar un mínimo de 10.000 pasos diarios. / David Castro

Con el teletrabajo instalado en muchos hogares y el miedo que todavía tienen muchas personas a entrar en un sitio cerrado como un gimnasio, ¿qué opción hay para practicar ejercicio? Caminar al aire libre. “Está al alcance de la mano de cualquiera. Es barato, sostenible y recomendado para cualquier edad. Lo puedes hacer. Lo debes hacer. ¿El motivo? La salud. Da igual tu velocidad. Si quieres andar deprisa, perfecto. Si no, al ritmo que puedas. Si cada semana aumentas mil pasos a los que ya estás dando estarás disminuyendo las probabilidades de muerte por cualquier enfermedad. A más pasos, menor índice de masa corporal”, afirma Sara Tabares, entrenadora personal y coautora de 'Entrena bien, vive mejor', un manual que lejos de ofrecer un entrenamiento con nombre propio (algo que no suele servir para nada) aplica las evidencias científicas al ejercicio físico y la vida saludable. 

"Andar es una manera de reducir el riesgo cardiovascular. Y también el de diabetes y obesidad"

— Sara Tabares, autora de 'Entrena bien, vive mejor'

“El mejor ejercicio físico es el que se hace. Y caminar lo es. Sus beneficios en la salud son evidentes. Practicarlo es una manera de tener menos papeletas para sufrir una enfermedad. Para empezar, reduces el riesgo cardiovascular. También el de diabetes y obesidad. El movimiento es fundamental, es vida. Tu cuerpo no se puede convertir en un lastre”, subraya Tabares, responsable del centro sanitario de entrenamiento Performa, en València.

Basta pasear por cualquier zona verde de cualquier ciudad para comprobar que muchos caminantes llevan relojes con podómetro incorporado. En muchas oficinas donde se trabaja presencialmente, el descanso para comer va acompañado de una caminata saludable. Personas que antes estaban apuntadas a gimnasios ahora contratan entrenadores para realizar ejercicio en parques y jardines. “La actividad física es como un medicamento. No todo vale. Es recomendable acudir a un preparador físico cualificado para que prescriba un ejercicio adecuado a cada persona”, comenta la experta.

Ciudades para caminar

“Caminar no es hacer deporte, pero sí es ejercicio físico”, añade Ana Montalbán, coordinadora de la Red de Ciudades que Caminan, una organización sin ánimo de lucro que desde 2013 trabaja para hacer de las urbes sitios donde los vecinos vivan mejor desde el punto de vista de la salud y el medioambiente. Ir al trabajo en bicicleta en lugar de coger el coche, no esperar al autobús sino hacer el trayecto andando, acudir a pie a comercios de nuestro barrio para realizar la compra o visitar a los abuelos dando una caminata en lugar de ir en metro son algunos de los consejos que Montalbán ofrece a los ciudadanos que quieran compensar todas las horas que se pasan sentados en la oficia o en sus casas.

"Caminar no es hacer deporte, pero sí ejercicio físico. Te cuidas a ti mismo y cuidas tu ciudad"

— Ana Montalbán, coordinadora de la Red de Ciudades que Caminan

Huir del terrible dúo que implica el coche y la oficina y apostar por realizar trayectos a pie es una forma de cuidarse a sí mismo y cuidar la ciudad, hacer de la urbe un espacio más amable, reforzar a los vecinos como grupo humano. “Apuesta por caminar, todo está más cerca de lo que parece”, destaca la responsable de Red de Ciudades que Caminan, que tiene disponible un mapa 'online' para medir distancias y tiempos.

Arquitecta de profesión, Montalbán reconoce que caminar es sinónimo de salud y también es la mejor manera de conocer tu ciudad. “Es una vía para descubrir calles que no conocías, historias de tu barrio. Con esa caminata haces también gimnasia mental porque vas asimilando información. Y también gimnasia visual porque pones la mirada -habitualmente fijada en el ordenador, el móvil o la tele- en el horizonte y el paisaje.

Desde que la pandemia comenzó a dar los primeros latigazos en España, Ciudades que Caminan siempre ha defendido la apertura de parques, espacios al aire libre donde el riesgo de contagio es muchísimo menor y que, sin embargo, sufrieron el cierre en muchas ciudades. “No solo hablamos de parques infantiles sino de todo tipo de parques, espacios verdes que son fundamentales para la salud física también en pandemia”, añade.

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