Consumo alega que prohibir toda la publicidad del juego es "imprudente"

Alberto Garzón

Alberto Garzón / periodico

Patricia Martín

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El ministro de Consumo, Alberto Garzón, presentó este viernes las líneas maestras del proyecto de real decreto que regulará la publicidad del juego, que será sometido el lunes a consulta pública, con la vista puesta en el que entre en vigor en torno al verano. La normativa es la más restrictiva del la UE (salvo en Italia), según destacó el ministro, pero no equipara la publicidad de los casinos ‘online’ a la del tabaco, que está prácticamente desterrada, como prometía el <strong>acuerdo de coalición</strong>. Por ello, ha desatado un aluvión de críticas, algunas de sectores de la izquierda, a las que Garzón respondió que una prohibición total de la publicidad sería “inadecuada” e “imprudente”.

La queja principal de asociaciones de consumidores y asociaciones que trabajan contra la ludopatía es que, aunque los comunicaciones comerciales se restringen a la madrugada, entre las 1:00 y las 5:00 horas, seguirán permitidas en las retrasmisiones deportivas a partir de las 20.00 horas. Para Facua-Consumidores en Acción esto supone una “grave irresponsabilidad porque la vinculación del sector con el mundo del fútbol es una de las claves de su enorme crecimiento en los últimos años”. Además, se consentirá que los deportistas sigan luciendo en sus camisetas las marcas de las casas de apuestas, si bien se vetará que los operadores patrocinen estadios o los equipos deportivos, como sucede en la actualidad.

Sin famosos ni apelaciones a un futuro sin deudas

En cuanto a las limitaciones en los contenidos, que también afectarán a <strong>Loterías</strong> y la <strong>ONCE</strong>, se impedirán los anuncios que estén protagonizados por famosos, sugieran que jugar soluciona tus problemas financieros, que representen de una forma atractiva el juego u otorguen superioridad moral a aquellos que juegan. Es decir, los creativos publicitarios y los anunciantes tendrán que cambiar radicalmente de estrategias. Si bien, persisten dudas sobre las reglas que regirán en Youtube y otras plataformas de internet. El ministro aseguró que hay “problemas de carácter técnico” pero que el real decreto avanza “al máximo” dentro de las competencias estatales.

Garzón aseguró que es consciente de que la nueva normativa “no contenta a todo el mundo”, dado que “hay empresas que van a perder mucho dinero” y colectivos que creen que es insuficiente, pero subrayó que en apenas 30 días él y su equipo se han “partido la cabeza” analizando “todas las alternativas” y tras hablar con los sectores implicados, analizar los datos, los costes y la situación internacional han optado por un “paradigma regulatorio estricto y no prohibitivo” al considerar que es la solución más “eficaz” para reducir la posibilidad de ludopatía y atender la demanda social. Según sus cifras, se verá el 99% de la comunicación comercial y el 80% de los actuales anuncios.

El ejemplo de Italia

El ministro alegó que en Italia, donde sí se prohibió completamente la publicidad, ahora están dando marcha atrás tras comprobar que los operadores han optado por el mercado “ilegal” que facilita internet, a través de páginas en países fuera de control, donde “no se regulan los mensajes, no se pagan impuestos y hay más consecuencias para la salud”. “Hay gente que va a jugar sí o sí y si se van al mundo ilegal empujamos a la gente que necesita protección a un mundo sin protección […] es inadecuado e imprudente”, señaló, además de presumir de que el decreto es “impecable técnicamente” y no se pueden “matar moscas a cañonazos”.

Respecto a la comparativa con el tabaco, aseveró que “fumar te llena los pulmones de basura sí o sí y jugar no necesariamente genera un problema”. Además, los datos de incidencia son muy diferentes, dado que fuma el 34% de la población y se calcula que juegan por internet el 3,5% de los españoles, una cifra también inferior al porcentaje de personas que bebe a diario (el 7,4%).