Bracket, el perro enfermo sustraído en Sant Cugat, aparece en un jardín de Sant Quirze

Bracket, el bulldog francés enfermo del corazón que fue robado el sábado en Sant Cugat del Vallès, ha aparecido sano y salvo esta tarde en un jardín particular de Sant Quirze del Vallès, a unos 15 kilómetros del lugar del hurto.

El animal acaba de ser entregado por agentes de la Policía Local de Sant Quirze, a Almudena Herraiz, su legítima propietaria quien, llorando de la emoción, ha recibido con inmensa alegria a su mascota, que se encuentra en buen estado.

Búsqueda contra reloj de un perro enfermo del corazón robado en Sant Cugat

Gracias a la policía, que buscó el chip

Fuentes de la Policía Local de Sant Quirze han explicado que a las tres de la tarde han recibido la llamada de un vecino alertando de que había un perro en su jardín. Una patrulla ha recogido al animal y lo ha llev ado a la comisaría donde los agentes le han pasado el detector de chips, de donde han obtenido los datos de la propietaria.

El hecho de que los ladrones hayan abandonado el perro en un jardín privado y por tanto cerrado implicaría su buena intención, ya que si lo hubieran dejado abandonado en la calle podría haber muerto atropellado o por agotamiento, ya que se trata de un animal de salud delicada que había sido operado del corazón.

Búsqueda de imágenes

La aparición de Bracket se ha producido justo cuando la Policía Local de Sant Cugat rastreaba las imágenes de videovigilancia del centro del municipio en busca del coche que utilizó una familia, con una niña pequeña, para llevarse el animal que estaba atado en la puerta de la tienda.

La sustracción del animal generó una gran actividad en las redes sociales y también en Sant Cugat donde decenas de voluntarios se ofrecieron para imprimir y repartir carteles. El robo, técnicamente denominado un hurto pues no medió violencia, sorprendió a la policía y a los veterinarios ya que no es habitual que un animal doméstico sea robado, aunque sean frecuentes las desapariciones.

Bracket desapareció el sábado al mediodía mientras su dueña, una dentista, compraba en una céntrica tienda de fruta y alimentación. El perro estaba atado al gancho de la entrada cuando, segun un testigo, un hombre y una mujer se acercaron con una niña de unos cuatro años, desataron al anuimal y se lo llevaron en un coche aparcado a unos 30 metros.

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