Los controles contra el maltrato infantil incluirán también a las embarazadas

Las 'consellerias' de Salut i Treball, Afers Socials i Famílies han presentado, este martes, el Protocolo de actuación ante el maltrato a la infancia y a la adolescencia en el ámbito de la salud, tal y como avanzó EL PERIÓDICO hace unas semanas. La nueva guía amplía el papel de los profesionales de la atención primaria y comunitaria (el anterior protocolo estaba limitado a los hospitales) en la detección de esta problemática, ya que se les ofrecerá herramientas en su actuación para ayudar a diferenciar qué es el maltrato y qué no, reducir el margen de interpretación subjetiva y favorecer la detección y notificación de los casos. La atención primaria juega un papel fundamental a la hora de detectar casos de maltrato en general, no solo infantil.

Como ha explicado el 'conseller' de Afers Socials, Chakir El Homrani, esta iniciativa "demuestra que la atención a la infancia debe ser integral" y, por ello, "requiere la cobaloración de varios departamentos". El Homrani ha destacado como uno de los aspectos clave del protocolo su intención de "evitar" la "victimización secundaria" del menor, sin caer por ello en el infradiagnóstico. Por ejemplo: evitando la repetición de las diligencias que se practican en estos casos y actuando, en general, con una mínima intervención, con rapidez y con especialización.

En este sentido, ha incidido en que Afers Socials, Treball i Famílies también está "ultimando" una unidad de tratamiento a niños y adolescentes víctimas de maltrato en Tarrogona, una iniciativa que existe en el norte de Europa y que Save the Children pide implantar en España, empezando por Catalunya.

Más formación

En el desarrollo del nuevo Protocolo de actuación ante el maltrato a la infancia y a la adolescencia han colaborado más de 60 profesionales de diferentes disciplinas y niveles asistenciales de Catalunya, además de la Direcció General d'Atenció a la Infància i a l'Adolescència (DGAIA). El documento, por un lado, contempla la formación y sensibilización de los profesionales sanitarios, con especial énfasis en la atención primaria. También prevé crear, progresivamente, equipos funcionales expertos en abusos sexuales y maltrato grave distribuidos por el territorio y que se irán integrando en la DGAIA.

"El año pasado en Catalunya se detectaron unos 490 casos de maltrato. Creemos que esta cifra aumentará porque siempre sucede así cuando hay más gente sensibilizada", ha señalado Carmen Cabezas, subdirectora general de Promoció de la Salut. Por su parte, la 'consellera' de Salut, Alba Vergés, ha dicho que este protocolo "no es solo una actualización del que ya había", sino que también "amplía" la perspectiva del mismo al incluir a la atención primaria. El protocolo, además, cuenta con un anexo específico para el maltrato prenatal y de bebés.

Recién nacidos

"El apartado del maltrato prenatal permite recoger la información de aquellas gestantes que se encuentran en situación de vulnerabilidad y que pueden estar siendo maltratadas o consumiendo drogas", ha explicado Vergés. La guía también recomienda actuaciones para detectar el maltrato en bebés y por eso recomienda realizar una búsqueda activa de signos de fatiga de los progenitores, así como dar consejos preventivos sobre las sacudidas al niño (una forma de maltrato que consiste en zarandear al bebé, por ejemplo, porque no deja de llorar, algo que le puede causar la muerte) desde los servicios de neonatología de los hospitales.

El protocolo, que profundiza en el apoyo psicológico, recoge además un apartado en el eCAP (la historia clínica informatizada de atención primaria) que permitirá a los profesionales de la primaria introducir los datos de los menores con indicadores de riesgo de maltrato. Estos datos se conectarán con el Registro Unificat de Maltratos Infantiles de Salut (RUMI Salut). También apunta indicadores de sospecha en niños y adolescentes, pero también en padres, madres y tutores, para evaluar si se está delante de un caso de maltrato.