Polémica

La 'vuelta al cole' de un club de alterne de Cartaya

La  vuelta al cole  de un prostibulo de Cartaya

La vuelta al cole de un prostibulo de Cartaya / periodico

Julia Camacho / Sevilla

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Colegialas -de las que hace tiempo que abandonaron la primaria- con minifalda, camisas escotadas y coletas que prometían seguir desnudándose componían la peculiar fiesta de vuelta al cole de El bosque, un prostíbulo de Cartaya (Huelva) cuya publicidad ya ha sido retirada por el Ayuntamiento y denunciada por el Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) al entender que incitaba a la pedofilia.  El club de alterne ha retirado este jueves la campaña.

El Ayuntamiento de Cartaya ha informado en un comunicado de que el dueño de este local ha acudido esta misma mañana a dependencias municipales y ha presentado un escrito en el que aclara que "ante las diversas actuaciones emprendidas por el consistorio con motivo de la publicidad de un evento a realizar en este establecimiento el día 15 de septiembre de 2017" manifiesta que "se ha retirado totalmente la publicidad del citado evento". En el escrito informa, además, de que el evento "ha sido cancelado", se disculpa por lo sucedido y cierra el escrito afirmando que lamenta "enormemente" y pide "disculpas a todo aquel que se haya podido sentir afectado".

Estupor vecinal

El folleto fue repartido el pasado martes por la localidad ante el estupor de los vecinos que se encontraban preparando la otra, la verdadera vuelta al cole en la Eso, Secundaria y el Bachillerato. En las octavillas se anunciaba la gran fiesta a partir de las 18.00 horas con gogós, 'strippers', show erótico y el sorteo de un bono de 300 euros. En él aparecían dos chicas, una sentada en un pupitre y simulando estar en clase tomando apuntes y otra, en el reverso, de pie y aparentando escribir en una pizarra. En segundo plano sí se aprecia la imagen de un hombre encorbatado y leyendo en actitud concentrada.

El anuncio de la fiesta empezó a correr de inmediato, en medio de grandes muestras de indignación, entre los grupos de whatsapp y las redes sociales, y llegó pronto al conocimiento de los responsables del ayuntamiento. Así, y después de analizar el tema con los servicios jurídicos, la Policía Local remitió un requerimiento al local para que retirase la publicidad al considerar que podría atentar contra los derechos de la mujer y la Ley de Protección del Menor. Al mismo tiempo, se constató que no se había solicitado ningún permiso para la celebración del evento, que requería de una autorización municipal.

"Sexista y vejatoria"

A través de las asociaciones, el caso también llegó a manos del Instituto Andaluz de la Mujer para que iniciase las medidas oportunas ante la utilización de la imagen de la mujer en la campaña publicitaria que los grupos políticos calificaron rápidamente de “sexista y vejatoria”, condenando que “ofrece explícitamente una imagen de sumisión sexual de la mujer, reducida a cuerpo objeto de consumo, asociada y a la adolescencia en contexto escolar”, según reprochó IU.

Desde el IAM mostraron su “rechazo absoluto” al cartel, y aunque reconocían que no tenían competencias para regular la actividad del local, sí subrayaron que podían “controlar su publicidad”. “Y es muy importante en casos como este hacer una llamada a la ciudadanía, especialmente a los hombres, contra campañas como ésta”. Por eso, remitieron la propaganda al Observatorio Andaluz de la Publicidad no sexista, alegando que no solo se trata a la mujer como “un objeto y una mercancía”, sino que incluso podría “incitar a la pedofilia”, según apuntó la directora del IAM en Huelva, Eva Salazar, “al usar uniformes de niñas en colegios”. Un planteamiento que comparte también el Movimiento Feminista de la provincia, que se ha sumado a la denuncia de la campaña.

Por su parte, el responsable del local, en declaraciones a varios medios locales, se mostró sorprendido por la reacción generada ante la convocatoria de la fiesta, subrayando que en otras ocasiones habían realizado campañas similares y nunca había sucedido nada