«Es exagerado»

El fallido proyecto de ley de Elena Salgado, del 2007, para restringir el consumo de alcohol entre los menores, que incluía severas restricciones publicitarias, resuena todavía en el Ministerio de Sanidad y entre los productores e importadores de vino, cerveza y bebidas alcohólicas de mayor graduación. Mientras prepara otra norma, el ministerio pide cautela, y el sector pone en duda la evidencia científica del nuevo estudio elaborado por especialistas de la UE y subraya lo«exagerado, desproporcionado y poco efectivo»de medidas como el veto total de la publicidad o llenar de leyendas sanitarias un producto que se«quiere equiparar a una droga más».

La futura norma, que refundirá todas las existentes en España, sí prevé vetar la publicidad dirigida especialmente a menores, sobre todo en la redes sociales, donde no existe control alguno.«Ir más allá en una prohibición general es más complicado y no está demostrado que sea efectivo»,defiende Francisco de Asís Babín, delegado del Plan Nacional sobre Drogas y partidario de«ir poco a poco, sensibilizando a la sociedad, y buscando un marco regulatorio común con toda Europa».

Impopular

Babín explica que la futura norma incorporará leyendas o rótulos sobre la prohibición del alcohol a los menores en los envases, las promociones y los locales de venta de alcohol. Pero no se atreve a dar una fecha«porque plantea dificultades técnicas»para las empresas y en el fondo teme el rechazo a una norma si solo debuta con una medida impopular.

La situación española contrasta con países como Francia, donde no está autorizada la publicidad ni en cine ni en televisión y en el resto de soportes solo está permitida en contadas ocasiones, informaElianne Ros.Las marcas no pueden patrocinar eventos culturales o deportivos y en las botellas ha de aparecer este mensaje:El abuso del alcohol es peligroso para la salud. Algo parecido ocurre en el Reino Unido.

La patronal de bebidas espirituosas FEBE defiende que la prohibición total de la publicidad implantada en algunos países no ha resultado para prevenir consumos abusivos y que lo decisivo es la prevención. Su director ejecutivo, Bosco Torremocha, es partidario de la autorregulación de la publicidad y presume de que el comité creado hace seis años en España no les ha abierto ni un solo expediente. En cualquier caso, apunta que la prohibición que pide el informe no afecta a su sector de lleno, ya que el 80% de sus bebidas se venden en hostelería y el resto en tiendas que tienen prohibido hacerlo a menores, y tienen vetada su aparición en televisión y en lugares públicos. Porque los consumidores deben ser mayores de edad, Torremocha ve inútil ir más allá en etiquetas delconsuma con responsabilidad, obligado desde el 2002.

Fuentes de la Federación Española de Industrias de la Alimentación y Bebidas (FIAB), que engloba al sector cervecero, consideran que«debe imperar el consumo responsable»,y que la evidencia científica debe demostrar, lo que a su entender no ha hecho todavía, la relación causal entre la publicidad y el consumo de alcohol entre los jóvenes.«No hay que combatir el producto sino su uso inadecuado. Como en el caso del sida, el problema no es el sexo sino cómo se practica»,argumenta Pau Roca, secretario general de la Federación Española del Vino (FEV).«Vetar la publicidad limitaría nuestra comunicación con el consumidor»,advierte en su oposición a limitarla y a más etiquetas.«Solo sirven para ir desligitimando el producto»,remacha Roca.