Psicología

Estrés postraumático: qué es y cuáles son sus síntomas

Las heridas traumáticas dejan secuelas permanentes

SER FELIZ

SER FELIZ / 123RF

Ángel Rull

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El estrés postraumático es un trastorno psicológico que afecta a muchas personas en todo el mundo. Se desarrolla después de experimentar o presenciar eventos traumáticos que ponen en peligro la seguridad física y/o emocional, como situaciones de guerra, desastres naturales, asaltos, abusos o accidentes graves. Aunque la mayoría de las personas pueden recuperarse naturalmente de estas experiencias, algunas desarrollan síntomas que persisten a lo largo del tiempo y afectan significativamente su calidad de vida.

¿Qué es el estrés postraumático?

El estrés postraumático es un trastorno de ansiedad que se desarrolla después de haber experimentado o presenciado un evento traumático. El impacto emocional del evento puede ser tan abrumador que la persona afectada tiene dificultades para procesarlo adecuadamente. A menudo, el estrés postraumático se asocia con una respuesta de miedo crónica que persiste mucho después de que el evento traumático haya ocurrido.

Las personas con estrés postraumático pueden experimentar una serie de síntomas que afectan su bienestar físico, emocional y mental. Estos síntomas pueden ser tan intensos que interfieren significativamente con su capacidad para funcionar en la vida diaria.

¿Cualquier persona puede tener estrés postraumático?

Aunque cualquier persona puede verse expuesta a eventos traumáticos, no todas desarrollarán estrés postraumático. La probabilidad de desarrollar este trastorno depende de diversos factores, incluyendo la gravedad del evento traumático, la duración del mismo, el apoyo social disponible después del evento y la capacidad individual para hacer frente a la situación.

Estos son los factores de riesgo para desarrollar estrés postraumático:

  • Experiencias previas de trauma: aquellas personas que han experimentado traumas previos en su vida pueden tener una mayor vulnerabilidad a desarrollar estrés postraumático después de un nuevo evento traumático.
  • Apoyo social limitado: un sistema de apoyo sólido después del evento traumático puede ayudar a reducir la probabilidad de desarrollar estrés postraumático. Por el contrario, aquellos que carecen de apoyo social tienen un mayor riesgo.
  • Factores genéticos: algunos estudios sugieren que ciertos rasgos genéticos pueden influir en la susceptibilidad de una persona al estrés postraumático.
  • Gravedad del trauma: la intensidad del evento traumático también puede influir en la probabilidad de desarrollar estrés postraumático. Eventos extremadamente violentos o prolongados suelen ser más propensos a causar este trastorno.

¿Cómo afecta en el día a día el estrés postraumático?


El estrés postraumático puede tener un impacto significativo en la vida diaria de quienes lo padecen. Las personas afectadas pueden enfrentar una serie de dificultades que afectan sus relaciones, trabajo, bienestar emocional y físico. Pero ¿de qué manera afecta en la vida cotidiana?

El estrés postraumático puede afectar de las siguientes formas:

  • Dificultades en las relaciones: las personas con estrés postraumático pueden tener dificultades para establecer y mantener relaciones cercanas, ya que la evitación y el retraimiento social son comunes. También pueden experimentar cambios en su comportamiento, lo que puede afectar negativamente la interacción con los demás.
  • Problemas laborales: el estrés postraumático puede interferir con el rendimiento laboral y la productividad. Las personas afectadas pueden tener dificultades para concentrarse, tomar decisiones o cumplir con sus responsabilidades laborales.
  • Trastornos de ansiedad y depresión: el estrés postraumático a menudo se asocia con el desarrollo de otros trastornos de ansiedad y depresión. La carga emocional y la hipervigilancia pueden llevar a una disminución del bienestar general.
  • Aislamiento social: la evitación de situaciones sociales y la dificultad para expresar y compartir las emociones pueden llevar a un aislamiento social, lo que puede empeorar el cuadro clínico.
  • Problemas físicos: el estrés postraumático puede desencadenar problemas físicos, como dolores de cabeza, problemas gastrointestinales y tensión muscular crónica.

Síntomas de estrés postraumático

El estrés postraumático se manifiesta a través de una amplia gama de síntomas que pueden variar en intensidad de una persona a otra. Y, aunque los síntomas varíen, eso no implica que la gravedad aumente o disminuya.

Estos son los síntomas más significativos que nos indican la presencia de estrés postraumático:

1. Recuerdos intrusivos

Las personas con estrés postraumático experimentan recuerdos recurrentes y perturbadores del evento traumático. Estos recuerdos pueden aparecer como pesadillas vívidas o flashbacks, donde la persona revive el evento traumático como si estuviera ocurriendo en ese momento.

2. Evitación

Los afectados tienden a evitar situaciones, lugares o personas que les recuerden el evento traumático. Este comportamiento se desarrolla como una estrategia para evitar la angustia emocional y las reacciones físicas que desencadena el recuerdo del trauma.

3. Hipersensibilidad

La hipervigilancia es una característica común del estrés postraumático. Las personas afectadas están constantemente alerta y en guardia, como si estuvieran esperando que ocurra algo malo. Esta reacción se debe a la percepción de amenaza constante, incluso en situaciones que no representan un peligro real.

4. Cambios en el estado de ánimo y cognición

Las personas con estrés postraumático pueden experimentar una variedad de cambios en el estado de ánimo, como tristeza, culpa, ira o una sensación de desapego emocional. También pueden presentar dificultades para recordar detalles específicos del evento traumático, lo que se conoce como "amnesia disociativa".

5. Sobresaltos y reacciones de miedo

Los afectados pueden experimentar sobresaltos exagerados y reacciones de miedo ante estímulos que les recuerdan el evento traumático. Por ejemplo, un sonido fuerte puede desencadenar una respuesta de miedo extremo y una sensación de que el peligro está presente.

El estrés postraumático es un trastorno psicológico complejo y debilitante que puede afectar a cualquier persona que haya sido expuesta a un evento traumático. Los síntomas pueden variar en intensidad y pueden tener un impacto significativo en la vida diaria de quienes lo padecen. Es fundamental que las personas que experimentan síntomas de estrés postraumático busquen apoyo y tratamiento profesional para abordar eficazmente el trastorno.

La terapia psicológica, como la terapia cognitivo-conductual, la terapia de exposición o la terapia EMDR, ha demostrado ser efectiva en el tratamiento del estrés postraumático. Además, es importante contar con un sistema de apoyo sólido, que puede incluir familiares, amigos o grupos de apoyo, para ayudar a las personas a enfrentar y superar los desafíos asociados con este trastorno.

En última instancia, el estrés postraumático no define a una persona, y con el tratamiento adecuado, el apoyo adecuado y el tiempo, muchas personas pueden recuperarse y continuar con una vida significativa y satisfactoria. La conciencia y la comprensión de este trastorno son cruciales para brindar apoyo a quienes lo necesitan y reducir el estigma asociado con las enfermedades mentales. La empatía y el respeto hacia aquellos que han experimentado traumas son esenciales para la reparación del daño.

* Ángel Rull, psicólogo.