Viaje al pasado íbero

El pueblo íbero que habitó el Empordà era conocido como los indiketes. Según han acreditado los expertos, la cultura íbera se forjó a finales de la edad de bronce y también a principios de la llamada edad de hierro en los siglos VIII-II a.C. Como que fue un asentamiento estable dejaron su huella y cultura. Los indiketes ocuparon una franja que iba desde el sur de la entonces península ibérica hasta el río Erau, ya en territorio francés, concretamente al Llanguedoc, según se detalla en la web de la ruta.

Para conocer este antiguo territorio íbero y el poso y cultura que dejaron, nada mejor que hacer una ruta. La Ruta de los Indiketes es un recorrido con un marcado caracter deportivo, histórico y cultural que resigue caminos milenarios del Empordà trazados por el pueblo íbero de los Indiketes y ahora precisamente ha ganado presencia puesto que ha sido reconocida a nivel europeo por la The Natural Adventure, todo un referente en el sector turístico europeo. La red de rutas llega a los 476 kilómetros, el que demuestra su importancia y extensión. Las rutas son especialmente interesantes desde la vertiente de la natura, pero también desde el punto de vista cultural. Según explican sus promotores, «la ruta resigue de forma circular la red de senderos históricos que dibujaron sobre el territorio los Indiketes, los habitantes íberos que ocupaban la zona del Empordà durante la época prerromana, antes de la entrada de las tropas romanas a través del puerto emporità en 218 a. C.». Son en total 22 etapas, que tienen entre 20 y 30 kilómetros cada una, y también diferentes grados de dificultad y desnivel acumulado. Por este motivo, es muy recomendable que, antes de iniciar nuestro itinerario, demos un vistazo a la ruta que queremos seguir. Todas las propuestas están pensadas para seguirlas en forma autoguiada, con apoyo, material e información de interés, que podemos encontrar awww.rutadelsindiketes.com.

Se trata de una propuesta turística sostenible y responsable con el entorno, que pretende rendir homenaje y contribuir a la conservación de la herencia histórica que dejó el pueblo íbero a la zona del Empordà, aseguran textualmente sus promotores. Por este motivo, los itinerarios, que se pueden hacer desde la modalidad de senderismo a la de excursionismo o en bicicleta, tanto de BTT como de carretera, pasan por puntos de interés cultural e histórico, como monumentos megalíticos, edificaciones como monasterios, necrópolis, ermitas e iglesias románicas y prerrománicas, ruinas de los antiguos poblados y ciudades griegas y romanas, entre otros.