Toma pan y moja

La calle más napolitana de Barcelona está en el Gòtic

Acaba de abrir en Escudellers un local especializado en la graffa, un pecado con forma de rosquilla típico de Nápoles. A pocos pasos se venden crostones y pizza

El Mundo Today | El VAR anula los goles de Pedro, Messi y Villa en la final de 2011 y da la Champions al Manchester United

La especialidad de La Bottega Della Graffa.

La especialidad de La Bottega Della Graffa. / O. B.

Òscar Broc

Òscar Broc

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Si te dejas caer por la parte más baja del Gòtic y escuchas a alguien decir: ‘guagliò’ o ‘tutt'appost’, estás en Escudellers, la rue más napolitana de Ciutat Vella. Me estoy flipando, he visto demasiados episodios de 'Gomorra', lo sé, pero lo afirmo porque acaba de abrir en dicha calle La Bottega Della Graffa (Escudellers, 6), un local especializado en la graffa, un pecado con forma de rosquilla, a medio camino entre el dónut y el buñuelo, que se rellena con paladas de cremas de distintos sabores. Es un dulce frito típico de Nápoles que tiende a los excesos de tan maravillosa ciudad. Pido una de pistacho, atravieso el recubrimiento de azúcar con gafas de esquiar, y tengo que protegerme con un paraguas para que el relleno no me salpique. ¿Está buena la graffa? Oh sí ¿Tu nutricionista te odiará cuando se entere? Oh, también. 

Pero el desfase napolitano no termina aquí. De hecho podría empezar en el otro extremo de la calle Escudellers, pues de allí despegan unos bocadillos morrocotudos que responden al nombre de crostone y, sorpresa, también son típicos de Nápoles. El local se llama Oimà (Escudellers, 42) y sus entrepanes napolitanos con pan rúsctico, embutidos italianos de calidad y otras lidenzas de importación, son la fórmula perfecta para comidas rápidas y/o improvisadas. Lo cierto es que tu particular homenaje a Gennaro Savastano puede comenzar con un buen crostone y culminar con una graffa de postre, aunque bien podría ser al revés: el orden de los factores no altera el orgasmo. 

Por cierto, en la calle Escudellers Blancs, a un minuto de los dominios de la graffa y el crostone, descubro que hay una pizzería. ¿El nombre del restaurante? L'Antico Borgo Napoletano (Escudellers Blancs, 14). Definitivamente, vivimos en una simulación.  

Suscríbete para seguir leyendo