Coctelerías-espectáculo de Barcelona: las experiencias que buscaremos en 2024

El espectáculo debe continuar. Y vaya si continuará. Como si hubiesen despertado de un extraño letargo, los noctámbulos ya no tienen suficiente con asaltar las coctelerías de moda para empinar el codo con los morritos así, como Mick Jagger. Quieren más. Quieren “experiencias”. Quieren volver a casa con mandanga de la buena para colgar en sus redes al día siguiente. Nuestro smartphone ya no se contenta con fotos de copas sofisticadas, este año exigirá movimiento, espectáculo, show, porque esos vídeos de TikTok y esos reels no se van a hacer solos.

Todo parece indicar que las coctelerías-espectáculo serán las reinas de la nueva temporada. Espacios que ofrecen copas imaginativas y de calidad, y juegan con el cliente, como es el caso de Spirit Cocktails BCN (Súria, 6), una coctelería sobrenatural que apuesta por el ocultismo para atraer a sus víctimas, digo, clientela. El reconocido mentalista Luis Pardo y M. Minerva están detrás de este caserón embrujado que parece el decorado de una película de terror, con sus cócteles con ojos, sus estampados de la alfombra de 'El Resplandor' y sus mesas con tablas de ouija incorporadas, por si te apetece darle la chapa a algún muerto. Sacarás más selfies que en una boda, pero cuidado al revisarlas, seguro que en alguna aparece un espectro intentado estrangularte. 

Con el miedo en el cuerpo, abandonamos los páramos de Spirit y nos dirigimos a Orient Express Cocktail Bar (Comte d’Urgell, 134), una fantasía ferroviaria que reconfirma el tópico de que la realidad supera la ficción. En esta magnífica coctelería -tragos elaborados de autor-, las copas te llegan en un tren. La coctelería tiene un circuito ferroviario en la barra central, con una locomotora de juguete que se encarga de transportar los cócteles. Con el espíritu de Agatha Christie flotando por todos los rincones, Orient Express juega con el cliente desde que entra y pide las copas, hasta que sale. La magnífica decoración y vestuario presentan guiños constantes a la leyenda del ferrocarril, un caramelo para cazadores de experiencias vía iPhone.

Y dejamos el chacachá del tren para abrazar la fantasía, pues es ahí donde reina Somnia Magic Bar (Montserrat, 13), una coctelería con efectos especiales, conocida tanto por su decoración, como por la decoración de sus descacharrantes cócteles. Somnia se apoya en la magia y en la mística de las ferias circenses de principios del siglo XX. La sensación es que has viajado en el tiempo y te has metido en una. Además, sazonan las noches con impactantes números de magia de cerca, lo que le aporta al local un valor añadido en términos de molonidad. El circo ha llegado a la ciudad, ¡pasen y beban!