Toma pan y moja

Judía, patata y nostalgia, por Òscar Broc

Unos cogen el Delorean, pero la mejor forma de viajar al pasado es aceptar el reto de Xavier Pellicer: un restaurante que hace juegos de magia con la verdura

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Òscar Broc

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Judía verde con patata. Un plato que en mi mundo es un trampolín al pasado. El recurso más utilizado por mi madre para alimentar a la familia, años ha. Quiero pensar que le ocurre a muchos catalanes: el aroma de la judía hervida les sume en un dulce estado de nostalgia; la olla de mamá borboteando, las tiras de leguminosa tiñendo de verde el agua en movimiento, la infancia concentrada en un plato simple, sano, popular, eterno

Comparto vivencias con Xavier Pellicer en la barra de su restaurante. Conozco pocos cocineros con semejante compromiso con el producto. Su obsesión no solo se ciñe a la recuperación de la pureza de las verduras, sino a sus profundas implicaciones emocionales. Me pone el plato de judía verde con patata de la casa, una obra de arte que va más allá del proceso masticación-deglución y se introduce en mis recuerdos como un virus informático, despertando sensaciones encriptadas por los rigores de la vida adulta y sus rutinas. 

Magia con la verdura

La patata en formato ñoqui, la judía verde en formato crema… Vaya detonación de nostalgia, felicidad y confort. El sabor a judías de otros tiempos, la caricia en la lengua de la nube de patata… Es un Matrix en el que podría vivir eternamente. El chef se explaya mientras reparte unas piedras de cuarzo sobre las hojas de los pedidos, habla de energías positivas y orquesta el servicio con una placidez impropia de una cocina que opera a pleno rendimiento. 

Y no solo hace juegos de magia con la verdura, también consigue enviarme a casa de mi difunta abuela con una 'pilota' de pollo con acelgas que recuerda a 'escudellas' perdidas y domingos con la 'iaia'. Unos cogen el Delorean y confían en un científico loco. A mí no se me ocurre mejor forma de viajar al pasado que aceptar el reto de Xavier Pellicer y saltar al vacío. Feliz viaje.   

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