El Govern abre el proceso para nombrar a otro mayor en los Mossos antes de entrar en funciones

La Conselleria de Interior ha abierto oficialmente, justo antes de que el Govern haya entrado en funciones por las elecciones del 12-M, el proceso para nombrar a un nuevo mayor en los Mossos d'Esquara, lo que permitiría situar en este rango vitalicio al actual comisario jefe, Eduard Sallent.

El Diari Oficial de la Generalitat (DOGG) publica este martes una resolución con fecha del pasado viernes, 15 de marzo -antes de que el presidente Pere Aragonès firmase ayer el decreto de disolución del Parlamento de Catalunya y de convocatoria de las elecciones catalanas del 12 de mayo-, para abrir el proceso para nombrar, por el sistema de libre designación, una nueva plaza de mayor en los Mossos.

El director de los Mossos, Pere Ferrer, ya anunció a los mandos de la policía, en una reunión del pasado 6 de marzo -antes de que Aragonès anunciara su decisión de adelantar las elecciones autonómicas-, su propósito de abrir el proceso para nombrar a otro mayor en los Mossos, la figura de más alto rango en el cuerpo y que desde 2017 ostenta también Josep Lluís Trapero.

Oficial

El proceso se ha abierto ahora oficialmente con la publicación de la convocatoria de esta segunda plaza de "mayor" en el Diario Oficial de la Generalitat (DOGC), aunque con la circunstancia sobrevenida de que el Govern entra en funciones tras la firma del decreto de disolución del Parlament.

Cuando finalice este proceso de designación, los Mossos pasarán a tener dos cargos con el rango de "mayor", uno de ellos Trapero, que lo es desde abril de 2017, y el otro, previsiblemente, si se presenta al concurso y es designado, el actual comisario jefe, Eduard Sallent.

De hecho, en la anterior convocatoria para la plaza de "mayor" -un rango del que los comisarios que la ostentan no pueden ser desposeídos-, únicamente se presentó Trapero, que ejercía entones como comisario jefe, al igual que ocurre ahora con Sallent.

Antes de Trapero, que fue nombrado "mayor" por el expresidente catalán Carles Puigdemont, esa figura sólo la había ostentado Joan Unió.

El rango de mayor, previsto por la ley de la policía catalana 10/1994, no supone que quien ocupe la plaza asuma más competencias, aunque sí comporta un reconocimiento a su labor y refuerza su ascendencia en la cúpula policial.

La resolución publicada hoy en el DOGC, firmada por la secretaria general de Interior, se puede recurrir en un plazo máximo de un mes.

Informe previo

Según las bases de la convocatoria, los aspirantes disponen de un plazo de veinte días hábiles a partir de mañana para presentar su solicitud para optar a esta plaza de "mayor".

El proceso prevé que el director de los Mossos emita un informe previo en relación con el participante que considere más idóneo para ocupar la plaza y la convocará para realizar un curso de adecuación, que es obligatorio y selectivo, en el Instituto de Seguridad Pública de Catalunya.

Interior publicará entonces la lista provisional de comisarios admitidos y excluidos, con indicaciones de los motivos de exclusión, tras lo cual se abrirá un periodo de diez días para alegar y posteriormente comunicará la lista definitiva con los participantes admitidos y excluidos.

Al finalizar el curso, el director de la Policía tendrá quince días para emitir un informe sobre el participante -si finalmente hay más de uno- que se considera más idóneo para este rango y propondrá la resolución de la convocatoria a la secretaría general de Interior, o bien que se declare desierto si ninguno de los participantes tiene las aptitudes, actitudes y competencias necesarias.

De esta forma, la resolución definitiva de la convocatoria la resolverá la secretaría general de Interior, de acuerdo con el director general de la Policía, en un plazo no superior a los seis meses a partir de la finalización del plazo de presentación de solicitudes.