PSOE y Junts pactan en Suiza empezar a negociar el “reconocimiento nacional” de Catalunya y la financiación

Las delegaciones del PSOE y de Junts han mantenido una cuarta reunión en Suiza del denominado "espacio internacional" acordado en el pacto de investidura del presidente Pedro Sánchez. Según confirman fuentes de ambas formaciones, en la reunión se ha puesto en valor la aprobación de la ley de amnistía, que era una de las condiciones pactadas para poder abordar la "resolución del conflicto político". Al encuentro ha acudido el número tres de los socialistas, Santos Cerdán, y el secretario general de los posconvergentes, Jordi Turull, junto a la portavoz en el Congreso, Miriam Nogueras.

Tras la aprobación de la norma, según explican las mismas fuentes, se pondrán en marcha los equipos de trabajo para completar los otros dos grandes compromisos del pacto de investidura. Esto es, los pasos para el "reconocimiento nacional” de Catalunya y la financiación, según concretan fuentes socialistas. A ellos se añadirán los ya existentes en el ámbito de la lengua catalana y de la ley de delegación de competencias en inmigración.

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Las posiciones de partida para la negociación de ambos asuntos ya se pusieron sobre la mesa en el pacto de investidura. En lo referente al ámbito “del reconocimiento nacional”, Junts propondrá “la celebración de un referéndum de autodeterminación sobre el futuro político de Catalunya amparado en el artículo 92 de la Constitución”. El PSOE, por su parte, defenderá el desarrollo del Estatut. El despliegue del Estatut es precisamente uno de los pilares de la hoja de ruta del candidato del PSC, Salvador Illa, en las elecciones catalanas.

En lo relativo a la financiación, los posconvergentes apostarán por la modificación de la ley orgánica de financiación de las comunidades autónomas (LOFCA) para la cesión “del 100% de todos los tributos”. Los socialistas plantearán medidas en línea con la condonación parcial de deuda, pactada con ERC, y un plan para facilitar el regreso a la Cataluña de las sedes sociales de las empresas que salieron por el ‘procés’.