Las cuentas catalanas

La presidenta del Parlament frenó la votación de presupuestos por el 'sí' de Casol y la ausencia de un diputado de Vox

Los Comuns mantienen el 'no' a los presupuestos tras rechazar la última oferta del Govern sobre el Hard Rock

La presidenta del Parlament, Anna Erra

La presidenta del Parlament, Anna Erra / RICARD CUGAT

Carlota Camps
Sara González
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Decisión polémica en el debate de presupuestos, que penden en estos momentos de un hilo. La presidenta del Parlament, Anna Erra, ha decidido este miércoles por sorpresa de todo el hemiciclo, que la votación de los presupuestos del Govern se celebre a las 15.30 horas y no cuando ha finalizado la sesión, a las 13.35 horas. El anuncio lo ha hecho trans constatarse la ausencia de un diputado de Vox, Sergio Macián, y tras escuchar que su excompañera de filas, Cristina Casol, expulsada del grupo tras denunciar acoso por razones de género, ha anunciado que votaría a favor de los presupuestos. Ese escenario hubiese decantado la balanza y habría permitido la tramitación de las cuentas catalanas pese al rechazo de los Comuns.

Aunque buena parte de los diputados han exhibido sus quejas por posponer -tras recibir la petición de Junts- la votación en el hemiciclo, prevista inicialmente a las 16.40 horas, Erra se ha mantenido en lo dicho y los parlamentarios han abandonado la sala. La hora era orientativa en previsión a si el Govern hacía o no uso del turno de réplica. Pero los propios documentos de la institución advertían de que la votación podría celebrarse antes de suspender la sesión al mediodía si los turnos de palabra habían finalizado.

Si la votación se hubiese celebrado justo al final el debate, el resultado hubiera sido de empate y, a tenor del reglamento, las cuentas catalanas habrían seguido su tramitación. El artículo 102 del reglamento de la Cámara deja claro que se rechazarían las enmiendas a la totalidad y que, así, el Govern habría logrado superar el rechazo de los Comuns y el resto de partidos, y continuar la negociación con el sí de ERC y el PSC.

Algunas fuentes parlamentarias hablan abiertamente de "tongo", mientras fuentes de Junts afirman que la decisión es de Erra y que no ha sido consensuada con las filas posconvergentes. Fuentes de la Mesa admiten que es potestad de la presidenta decidir la hora de una votación y que, por mucho que haya sido un movimiento faltado de pulcritud que debería haberse argumentado vía reglamento, difícilmente puede ser impugnada.