La ley para que no prescriban los delitos de pederastia emprende el camino hacia el Congreso

Con 109 votos a favor, el Parlament ha dado este miércoles el paso definitivo para mandar al Congreso la ley que debe garantizar que no prescriban las agresiones sexuales contra menores castigadas con penas más altas, de cinco años o más. Tras meses de trabajo en la comisión de investigación parlamentaria sobre la pederastia en la Iglesia, la propuesta impulsada por el PSC, ERC, Junts y los Comuns ha salido adelante con los votos también de Cs. La CUP y el PP se han abstenido -como ya hicieron hace dos semanas al iniciar la tramitación-, aunque por razones diferentes, y solo la extrema derecha de Vox ha votado en contra. Ahora, el texto se remitirá al Congreso para que sea tomado en consideración y aprobado definitivamente, ya que la Cámara catalana no tiene competencias para reformar el Código Penal.

"Es un paso muy importante por el que llevamos luchando ocho años", ha celebrado Miguel Hurtado, activista y primer denunciante del caso Montserrat, tras la luz verde de la Cámara catalana. Hurtado ha recordado que esta norma no servirá para casos como el suyo, pero se ha mostrado esperanzado con que sí sea útil para las generaciones futuras. Y es que ley no tendrá carácter retroactivo, pero víctimas y activistas confían en poder evitar que se repitan casos como el del profesor condenado por el caso Maristas, Joaquín Benítez. Una veintena de acusaciones contra él decayeron porque ya habían prescrito. Algo que provoca una "total y completa impunidad", en palabras del mismo Hurtado.

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En un sentido similar se han expresado los grupos impulsores durante el pleno. "Los abusos a menores son execrables y repugnantes y no deberían quedar impunes nunca", ha denunciado la diputada del PSC, Judit Alcalá, que ha defendido la necesidad de ampliar los plazos para dar la posibilidad a las víctimas de emprender medidas legales cuando hayan "podido superar las barreras emociones" y se sientan "preparadas" para dar el paso. Una argumentación parecida a la que ha hecho la posconvergentes Glòria Freixa, que ha avisado de que la prescripción no puede convertir "en inocentes a los culpables". Freixa también ha aprovechado para criticar con dureza al presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE) y Arzobispo de Barcelona, Joan Josep Omella, por haber dado plantón a la comisión de investigación parlamentaria.

Desde ERC, la diputada Raquel Sans ha destacado que la aprobación del Parlament es un "pequeño paso" para equipararse con los países europeos que ya contemplan esta imprescriptibilidad en su ordenamiento jurídico -14 de los 27 países de la UE-, mientras que Susana Segovia de los Comuns, que también ostenta la presidencia de la comisión de investigación sobre la pederastia en la Iglesia, se ha comprometido en seguir trabajando desde la Cámara catalana para conseguir unas conclusiones lo más "ambiciosas" posibles. En cambio, la CUP y la diputada no adscrita Cristina Casol se han abstenido al considerar que la norma es "insuficiente", por no contemplar la retroactividad y porque "no garantiza una reparación por completo", algo que los impulsores consideran que provocaría inseguridad jurídica.

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El texto propone que los delitos de abusos contra menores castigados con penas iguales o superiores a cinco años de cárcel, no caduquen nunca; al tiempo que plantean que se eleven los años de prescripción del resto de delitos castigados con penas inferiores. La norma también propone que no venzan los delitos como la prostitución de menores o su captación para la exhibición o la pornografía.

A partir de ahora, el texto se enviará al Congreso, donde las víctimas esperan que se apruebe y hasta ambicionan con poder sumar más apoyos que los conseguidos en el Parlament. Así lo ha deseado Hurtado y ha asegurado no entender por qué el PP no se ha sumado a la votación, cuando durante el último año los populares han criticado hasta la extenuación la excarcelación de agresores sexuales con la aplicación de la ley del 'solo sí es sí'. "Si el legislador de Madrid hace como en Catalunya y se basa en la evidencia, tendremos una ley de imprescriptibilidad en España", ha aseverado.