Sergi Sabrià: "Yo puedo decir cosas que el president no diría"

Sergi Sabrià (Palafrugell, 1975) es el nuevo viceconseller de Estratègia i Comunicació del Govern. Mano derecha del president Pere Aragonès, entre sus misiones está la de ser una voz más contundente para defender la obra del ejecutivo y medirse con la oposición.

¿Por qué el Govern necesita un viceconseller de Estratègia i Comunicació?

Queremos reforzarnos para este año de legislatura que queda y por los cuatro que vendrán después porque nuestro objetivo es también ganar las próximas elecciones.

Hay otra tesis: que es que la de que el Govern necesita subir el tono. ¿Este es el encargo del president?

Que yo tenga un perfil público es una de las funciones. Lo he hecho en otras etapas. Yo puedo decir cosas que el president no diría, no por encargo, sino también por talante y forma de hacer. Pero decimos las mismas cosas. Quizá suena distinto, pero decimos lo mismo. Esta es una diferencia respecto a otros gobiernos.

¿El Govern ha sido demasiado dócil hasta ahora?

Es una cosa más cuantitativa que de tono alto o bajo. Hemos hecho un esfuerzo muy grande para explicarnos mucho. Ahora añadimos más voces y nos explicaremos todavía más. Cuando toque levantar el tono, lo levantaremos.

Aragonès ya es candidato y hay cambios en ERC y en el Govern. ¿Se pone toda la carne en el asador para aguantar hasta el final del mandato o se activa la maquinaria electoral?

Era importante definir el candidato. No tanto por una necesidad de ERC, sino porque había cada vez más preguntas. Ha estado bien para no alimentar los rumores de adelanto electoral, hay mirada larga.

¿Esto responde a un pulso interno entre Junqueras y Aragonès?

Todo el mundo sabe que Aragonès fue candidato porque Junqueras estaba en prisión. En esta decisión, Junqueras es una de las personas clave que dice que tiene que ser él: fue así entonces y ha sido así ahora, que hay una inhabilitación.

¿Se ha contemplado convocar elecciones en cuanto el Govern tenga presupuestos y viendo que habrá duras restricciones por la sequía?

El problema de la sequía es estructural y perdurará en el tiempo. Ha venido para quedarse. Íbamos con el trabajo muy atrasado. Estamos avanzando a un ritmo muy bueno las nuevas infraestructuras, pero llevamos mucho tiempo de retraso. Y en medio de todo esto, la solución no es convocar elecciones, sino hacer el trabajo. Sería feo que alguien quisiera sacar rédito electoral de que no llueva porque corresponsables de que las infraestructuras no estén hechas hay unos cuantos.

Que no se me enfade nadie, pero entre el proyecto del PSC y el proyecto de Junts hay pocas diferencias

El objetivo de ERC es renovar la Generalitat otros cuatro años, pero nadie tendrá mayorías absolutas. ¿Mirarán hacia el PSC o hacia Junts?

Lo importante es que el país continúe teniendo un proyecto de izquierdas y progresista y que tenga claro que la prioridad es la resolución del conflicto político. Esto solo lo representa ERC. No sé cómo explicarlo sin que se me enfade nadie, pero entre el proyecto del PSC y el proyecto de Junts vemos demasiado pocas diferencias. El PSC tiene de izquierda cada vez menos y los dos proyectos se parecen cada vez más. Y no solo tenemos que hablar de estas dos opciones. También tenemos que ser capaces de hacerlo con la CUP y los Comuns, con quienes tenemos muchas afinidades.

Si miramos las últimas alianzas de ERC, hay ruptura con Junts y pactos con el PSC y el PSOE. ¿Se repetirá este esquema en la próxima Generalitat?

Para nosotros esta es una conclusión errónea. Es decir, lo que llevamos haciendo desde hace mucho tiempo es confrontar y negociar con el PSOE. Muchas más veces con el PSOE que con el PSC. 

Cuando el PSC tiene que elegir entre Catalunya y el PSOE, suele elegir al PSOE

¿Tiene la sensación de que el PSC está dilatando la aprobación de los presupuestos de la Generalitat?

Un poco. Tengo la sensación que el PSC tiene una tendencia que no es buena que es que, cuando tiene que elegir entre Catalunya y el PSOE, suele elegir al PSOE. En una situación en que estás negociando presupuestos, que son 2.400 millones más para los catalanes, hemos ido muy lentos porque ellos estaban mucho más pendientes de ver el ritmo de los presupuestos en Madrid. Y de esto hay más ejemplos. Cuando hablamos de financiación singular: ¿cómo puede salir Salvador Illa a decir que no cree que Catalunya necesite una financiación singular? Solo tiene una explicación que es que ha vuelto a mirar a Madrid y ha vuelto a mirar al PSOE. Todo lo que no sea 'café para todos' le genera una situación incómoda y esto inhabilita el PSC para gobernar Catalunya.

Todo lo que no sea 'café para todos' incomoda al PSC y esto le inhabilita para gobernar Catalunya

Junts es otro socio posible para los presupuestos. ¿Hay más reuniones programadas?

Ellos tienen muchos papeles [sobre los presupuestos] y nosotros tenemos muy pocas respuestas sobre estos papeles. Nos gustaría mucho hacer los presupuestos con Junts, pero no se ponen a ello y creo que lo hemos intentado. Tienen toda la documentación, tienen las propuestas, pero les cuesta.

¿Para cuándo la reactivación de la mesa diálogo con el Gobierno? Hay citas electorales como las gallegas, las vascas y las europeas y cuando hay elecciones por el medio suele congelarse.

Al PSOE le cuesta siempre. No tiene unas ganas locas de hablar con nosotros de referéndum. ¿Crees que al PSOE le apetece reunir la mesa de negociación? Bien no le va nunca. Por lo tanto, siempre ha sido una cuestión de aritmética. Nos ha ido muy bien el viraje de Junts, que no les ha gustado negociar hasta que ellos han podido tener la mesa de negociación que le ha dado la aritmética. Por lo tanto, cuando el PSOE nos necesita, tenemos oportunidades de que pasen cosas imposibles. España no quiere un referéndum, pero la aritmética nos ha dado la posibilidad de ponerlo ahora sobre la mesa. Quedamos en reunir la mesa en el primer trimestre e intentaremos que pase.

Tiene que haber un proceso natural que nos lleve a fusionar las tres mesas de negociación

Hay tres mesas: la de diálogo, la Junts-PSOE y la ERC-PSOE. ¿Es partidario de fusionarlas?

Tiene que haber un proceso natural que nos lleve a fusionar las tres. Estoy muy agradecido de la decisión de Junts de abandonar la confrontación inteligente, que yo no entendía lo que era y creo que mucha gente tampoco, e ir hacia la vía de negociación en una mesa. Tres mesas no es la mejor solución, la mejor es una y, por tanto, creo que el tiempo nos irá llevando hacia aquí.

¿Y un verificador? Sabemos el nombre del de Junts, pero no del de ERC...

He dedicado muchas horas a entender cómo se negocia, cómo se verifica, y en estos procesos el verificador sale el día que se acaba la mesa. Yo creo que no nos aporta nada a día de hoy ponerle publicidad o presión a esta verificación. No os lo diré.

Usted ha sido espiado con Pegasus. ¿Cómo se negocia con un Estado que los Mossos dicen que le espía?

Nosotros somos la parte pequeña, la parte débil, la que no es capaz de espiar al enemigo ni quiere hacerlo. Ya sabemos que el Estado lo hará todo para no romperse. Éramos conscientes de todas las trampas que nos harían y, como no son muy buenos, tenemos las pruebas. El Estado lo hará todo para que no seamos independientes y esto no ha hecho que nos rindamos.

¿Ha habido malestar en el Govern por el hecho de que Junts pactara con el PSOE delegar a Catalunya las competencias en inmigración sin comentárselo?

Es política y cada cual busca sus resultados y busca que la ciudadanía se los reconozca, pero a mí me parece que falla algo. ¿Cuántos días han pasado y no han publicado el acuerdo? Algo falla. Dadnos el texto del acuerdo que nos ponemos a trabajar, pero no hay texto. La primera ley es que se tiene que negociar por escrito.

¿Le molesta el 'café para todos' por el que el PSOE cede a las otras comunidades lo que primero pacta con ustedes para Catalunya como el Ingreso Mínimo Vital, Rodalies, las competencias en inmigración...?

Yo quiero la parte que me corresponde a mí y negociar bien. Si después de esto lo quieren dar a otro, a mí me da igual. Yo lo que quiero es ayudar a mi gente y estaré encantado de que los extremeños puedan ayudar a su gente si tienen la capacidad de gestionarlo.

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