Cambios en el ejecutivo catalán

La oposición acusa a Aragonès de convertir el Govern en su "comité electoral"

Aragonès refuerza su núcleo duro en el Govern con Vilagrà de vicepresidenta y Sabrià de viceconseller

MULTIMEDIA | Así es el Govern de Aragonès para acabar la legislatura

PSC y Junts acusan a Aragonès de hacer cambios en el Govern por motivos electorales

El president de la Generalitat, Pere Aragonès, este miércoles en el Parlament

El president de la Generalitat, Pere Aragonès, este miércoles en el Parlament / TONI ALBIR / EFE

Sara González
Carlota Camps
Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El reproche de la oposición ha sido unánime en el Parlament: no hay grupo, a excepción de ERC, que no considere que los últimos cambios que ha efectuado Pere Aragonès en el Govern responden a que ha puesto en marcha el "modo electoral", pese a que se ha esmerado en dejar claro que los comicios no serán hasta 2025. Han aumentado los decibelios hasta tal punto de acusar al president de tratar de convertir el Executiu en su "comité electoral". Especialmente, han hurgado, por situar a Sergi Sabrià como viceconseller de Estratègia i Comunicació y por elevar a vicepresidenta a Laura Vilagrà en lugar de a una consellera a cargo de materias de peso en la gestión.

En su intervención, el president Aragonès ha justificado los cambios como una forma de reforzar sus dos grandes negociadores con el Gobierno ante el reto de afrontar la reanudación de la mesa de diálogo, el traspaso de Rodalies, y la demanda de una nueva financiación. También ha intentado despejar el fantasma de unas elecciones anticipadas: "Tenemos mucho trabajo por hacer hasta febrero del 2025. Hay que completar el trabajo, que es lo que toca".

El "jefe de campaña" y la "número 2"

Sin embargo, para socialistas y posconvergentes, los principales rivales de ERC, este tercer cambio en la composición del Govern no responde a la gobernabilidad, sino a los intereses de Aragonès tras ser ratificado el pasado sábado como candidato de la formación a las próximas elecciones. Especialmente agrio ha sido el líder del PSC, Salvador Illa, con quien precisamente los republicanos aspiran a aprobar los presupuestos. "Este es un error de su presidencia que la ciudadanía no merece. Está en modo electoral cuando nombra viceconseller a su jefe de campaña", ha espetado, además de tachar de "trampa" los movimientos de piezas en el ejecutivo.

No se ha quedado aquí el jefe de la oposición, sino que además de señalar que no puede considerarse "estable" un Govern con tres remodelaciones en tres años, ha lanzado la "sospecha" de que los cambios responden también a "equilibrios" en ERC entre él y Oriol Junqueras. "Catalunya necesita a alguien que piense en Catalunya y no en el partido", ha sentenciado, además de recordar que continúa gobernando con una minoría de 33 diputados y con crisis abiertas como la de la sequía o la educación.

De manera similar se ha expresado el presidente del grupo parlamentario de Junts, Albert Batet, que también ha considerado que los cambios responden simplemente "a equilibrios de partido" y a sus intereses electorales. "Ha decidido quién será su jefe de campaña y quién irá de número dos en su lista; esto no fortalece las instituciones", ha afirmado Batet, que ha recriminado al president no haber nombrado un viceconseller "para la sequía o para hacer frente a los malos resultados de los informes PISA". 

Junts carga contra el "salvavidas" de Illa

Además, Batet ha ironizado con que Aragonès ya ha "superado el tripartito" con sus tres remodelaciones de Govern y ha llegado a preguntar si la nueva atribución de Sergi Sabrià como viceconseller es simplemente "criticar a Junts per Catalunya". Unas críticas del dirigente de Junts dirigidas contra Pere Aragonès, pero que también han salpicado a Salvador Illa. Batet ha acusado al PSC de ser "responsable de la situación actual" por hacer de "salvavidas" de ERC con los presupuestos, los pactos en las Diputaciones o la posibilidad de un acuerdo en el Ayuntamiento de Barcelona.

"Nada se aguanta", ha hurgado también la presidenta de En Comú Podem en el Parlament, Jéssica Albiach, que le ha preguntado directamente a Aragonès si las decisiones que tome a partir de ahora las tomará "como candidato o como presidente" y si lo hará pensando en "el bien del país o el bien del partido". Para los Comuns, se trata del "enésimo intento" de ERC de "levantar la cabeza" de cara a las próximas elecciones. Unas críticas parecidas a las que ha despachado la diputada de la CUP, Mar Ampurdanés, que ha lamentando que el cambio no tenga efectos en la hoja de ruta del Govern ni cumpla con el "giro" que le exigen los anticapitalistas.

Tsunami Democràtic

En cambio, Ciutadans y el PP han especulado con posibles intereses jurídicos detrás del ascenso de Sergi Sabrià. Unas afirmaciones que han causado sorpresa e incomodidad en la bancada del Govern. Así lo ha dado a entender el presidente parlamentario de Cs, Carlos Carrizosa, que ha considerado que Sabrià podría acabar "investigado por el caso del Tsunami Democràtic" por terrorismo y que su nombramiento como viceconseller sería una "pretensión para que si lo imputan", quedará "blindado".

También la portavoz del PP, Lorena Roldán, ha querido recordar el "historial y currículum" de Sabrià, acusándole de "dar instrucciones a los catalanes para boicotear el aeropuerto", y ha lamentado que Aragonès no aprovechara la ocasión para dar por acabada la legislatura. Finalmente, el líder de la extrema derecha de Vox, Ignacio Garriga, ha pedido explícitamente elecciones.