La reforma de la Constitución echa a andar con PSOE y PP reclamándose un mayor entendimiento mutuo

En poco más de una semana la Constitución será modificada por tercera vez desde 1978. La palabra "disminuidos" desaparecerá y será sustituida por "personas con discapacidad". El cambio, reclamada por los colectivos sociales desde hace años, ha sido aceptado a trámite por una amplia mayoría del Congreso -solo Vox se ha abstenido- gracias al acuerdo que Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo cerraron a finales de diciembre. Retocar el artículo 49 de la Carta Magna fue el único oasis de entendimiento pleno entre ambos. Este martes, en el primero de los debates que debe afrontar la iniciativa, el líder del PP ha aplaudido el pacto con los socialistas, aunque también ha aprovechado para criticar duramente las negociaciones del Gobierno con sus socios parlamentarios, y el ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, ha señalado que el camino es el "entendimiento".

¿Porqué hay que desterrar la palabra 'disminuido' para hablar de discapacidad?

"La modificación es modélica porque parte de una reivindicación social (...) y porque adquiere forma de un acuerdo entre los dos grandes partidos. Ha habido una negociación honesta, un texto compartido y con los informes preceptivos que avalan la modificación", ha dicho Feijóo sobre las conversaciones con el PSOE. Y, por contraposición, ha denunciado que las otras leyes impulsadas por el Ejecutivo son fruto de la imposición de "una minoría que pretende suplantar a las mayorías", que se elaboran con "opacidad" y con el objetivo de "erosionar la ley de leyes".

Para concluir, ha hecho un llamamiento al PSOE a que sigan dialogando con ellos como lo han hecho para esta modificación: "Este es el camino que debemos emprender. Si mantenemos esta voluntad, esta reforma no sería un oasis en el desierto de la crispación que algunos han elegido". Bolaños también ha reclamado a los conservadores que salgan del 'no' eterno: "Este es el camino, entendernos en lo que es indiscutible, en cumplir la Constitución y en reformarla para mejorarla también".

La reforma de la Constitución para eliminar el término "disminuidos", un oasis de entendimiento entre Sánchez y Feijóo

La modificación

El diputado del PSOE Emilio Saez, exvicepresidente de CERMI y exdeportista paralímpico, ha recordado que en España hay cerca de 4.300.000 personas con discapacidad y que era imprescindible acabar con la palabra "discapacitado". En este sentido, ha recordado que en la década de los 70 fue calificado por el Estado como "subnormal" a causa de su poliomielitis, en los 80 de "inválido" y en los 90 de "disminuido". Así, ha defendido la necesidad de implementar en la Constitución un lenguaje que sea "digno y justo".

También ha apuntado que con el nuevo artículo 49 las personas con discapacidad podrán reclamar a los poderes públicos más derechos. En concreto, el texto que se aprobará de manera definitiva el próximo miércoles se recoge que los poderes públicos "impulsarán las políticas que garanticen la plena autonomía personal y la inclusión social de las personas con discapacidad, en entornos universalmente accesible". Añaden que "se atenderán particularmente las necesidades específicas de las mujeres y los menores con discapacidad".

Otros asuntos

La propuesta, pactada únicamente entre el PSOE y el PP, ha sido aceptada por la amplia mayoría de la Cámara Baja, con la única excepción de Vox, aunque entre los socios del Ejecutivo ha habido numerosas críticas. Sobre todo, porque socialistas y populares hayan impuesto la reforma al resto de grupos, sin apenas debate y con procedimiento exprés. Varias formaciones, entre ellas Sumar y el PNV han anunciado que registrarán enmiendas para abrir debates sobre otros asuntos de la Constitución.

No obstante, Feijóo ya se ha cerciorado de recordar que el pacto con el PSOE incluye limitar la reforma al artículo 49. Incluso, fuentes socialistas barajan que las enmiendas de sus socios podrían ser inadmitidas a trámite por no versar sobre este precepto concreto. A la espera de la última decisión que se adopte, los grupos podrán registrar enmiendas durante este miércoles y el jueves se debatirán en un nuevo pleno del Congreso que, además, dará el visto bueno a la proposición de ley. La modificación quedará lista para que el próximo miércoles el Senado lo apruebe de manera definitiva.