Disturbios contra la amnistía

Sánchez asegura que la "violencia" en las sedes del PSOE muestra la "necesidad" de que haya investidura

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Sánchez se reúne con los trabajadores de Ferraz

Sánchez se reúne con los trabajadores de Ferraz. / VÍDEO: PSOE

Juan Ruiz Sierra

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Pedro Sánchez se ha desplazado este miércoles a la sede central del PSOE, en la madrileña calle de Ferraz. Un día después de que el lugar se convirtiera de nuevo en el escenario de graves disturbios por parte de simpatizantes de extrema derecha que protestaban contra la futura ley de amnistía, el presidente en funciones ha querido transmitir a los trabajadores socialistas su "solidaridad" ante estos hechos. Para Sánchez, en plena negociación con Junts per Catalunya para lograr ser reelegido durante una votación en el Congreso que en principio tendrá lugar la semana que viene, la “violencia” de estos días muestra la “necesidad” de formar gobierno cuanto antes.

El líder socialista compara lo ocurrido con el asalto al Capitolio y responsabiliza al PP

“Si algo demuestran estos días tan aciagos es la necesidad de que [la investidura] salga adelante, de que este país sea gobernado por el PSOE desde la razón y los principios de democracia, libertad y convivencia”, ha señalado Sánchez. “Podrán decir, podrán hacer, pero no nos intimidan. Vamos a seguir adelante y tener gobierno”, ha añadido ante los trabajadores de la sede de Ferraz, que lo han recibido con aplausos en un edificio que seguirá la recomendación trasladada el lunes a las federaciones de que permanezca cerrado por seguridad en los horarios previstos para las protestas.

Sánchez ha vuelto a incidir en las mismas ideas horas más tarde, a través de una carta a los militantes de su partido enviada poco antes de que comenzara una nueva jornada de protestas en toda España sin autorización de las respectivas delegaciones del Gobierno. En el escrito, el presidente en funciones compara lo ocurrido estos días con el asalto al Capitolio en EEUU por los seguidores de Donald Trump o el intento de toma del Congreso brasileño por parte de los admiradores de Jair Bolsonaro para acabar concluyendo que gran parte de la culpa es del PP. “Episodios lamentables de una derecha tradicional que acaba devorada por los sectores más ultras, como está ocurriendo en España. Unos con sus actos, y otros con su silencio cómplice, son responsables de un ataque dirigido no sólo contra el PSOE, sino contra la democracia y la Constitución que dicen defender y que no dejan de violentar”, argumenta el presidente en funciones.  

"Acción u omisión"

"No esperamos nada de quienes por acción u omisión apoyan el asedio a las casas del pueblo socialistas. Su silencio les retrata. El avance social y la convivencia merecen la pena. No quebrarán al PSOE", escribió Sánchez el martes por la noche en la red social X, la antigua Twitter. El mensaje iba dirigido tanto a Santiago Abascal, el líder de Vox, quien el lunes participó en las protestas frente a la sede socialista, que ese día fueron más pacíficas que las del martes, como al presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo.

En un mensaje publicado poco después, Feijóo culpó al presidente en funciones de los disturbios y evitó condenarlos. "El malestar social es responsabilidad de Sánchez, pero las protestas deben partir del respeto y ejemplaridad que faltó siempre al PSOE y sus socios. No somos como ellos. Ni como la minoría que actúa igual. Nos vemos el domingo 12 a las 12 en las plazas de toda España", escribió el líder de los conservadores, en referencia a las protestas contra la amnistía que ha convocado su partido.

Este miércoles, en cambio, Feijóo sí ha expresado su rechazo a la violencia, si bien de forma genérica, pero ha insistido en que el líder socialista no puede dar "ninguna lección" porque va a "amnistiar la violencia" en referencia al carpetazo judicial al 'procés', del que se beneficiarán los CDR y Tsunami Democràtic, organizaciones independentistas que también protagonizaron graves disturbios.

Para el Ejecutivo, sin embargo, las palabras del líder del PP siguen siendo demasiado tibias. "Lamento profundamente que Feijóo haya llegado tarde y mal a condenar esta violencia -ha señalado desde Bruselas, la vicepresidenta primera, Nadia Calviño, informa Silvia Martínez-. Estas escenas generan intranquilidad en los ciudadanos, pero que sobre todo ponen en cuestión la actitud de algunos lideres políticos que parecen no entender que uno de los conceptos claves de un régimen democrático es el respeto a los resultados electorales, a la ciudadanía y al intercambio de puntos de vista en un contexto de paz y tranquilidad. Insto a todos aquellos que están alimentando el odio y el conflicto entre españoles y territorios a que cambien de actitud y contribuyan a mejorar la convivencia".