El PSOE se revuelve contra el “boicot” a la investidura: “No es tiempo de trincheras, sino de tender puentes”

“No todo vale”. El PSOE ha arremetido contra el debate de la Comisión General de las Comunidades Autónomas del Senado, convocado por el PP como ariete contra la negociación de una amnistía, tanto por “instrumentalizar” el Senado como por intentar “boicotear” la formación de gobierno. El portavoz de los socialistas en la comisión, Juan Espadas, cargó contra la intención de “cuestionar la legitimidad de este proceso”, en referencia la negociación de investidura, y el uso de las instituciones “dañando la credibilidad de nuestra democracia y a España”.

El tono duro empleado por el senador andaluz era el esperado por la estrategia del PSOE de desdeñar el debate impulsado por los populares en la Cámara Alta, valiéndose de su mayoría absoluta. “Solo han empleado argumentos para descalificar que se pueda llegar a un acuerdo”, protestó el senador socialista para concluir que “no aceptan y llevan muy mal el resultado de las elecciones”. Según Espadas, un debate “a martillazos, en lugar de esperar el 

debate de investidura

”.

“No es tiempo de trincheras ni de ‘una, grande y libre’, sino de tender puentes y construir convivencia”, defendió el socialista andaluz basándose en el mandato de las urnas y sin mencionar en ningún momento la ley de amnistía. El 23-J, argumentó, la mayoría habría dicho “no a un acuerdo PP y Vox” y “sí a un gobierno de progreso”.

El líder de los socialistas andaluces quiso llevar el debate al sistema de financiación autonómica y retó a los populares a convocar un debate sobre este asunto. En esta línea, volteó el argumentario del PP por la igualdad de todos los españoles. “Los gobiernos del PP recortan”, replicó para preguntarse si los presidentes regionales conservadores “están contribuyendo de verdad o no a que avance la igualdad en sus territorios o, si por el contrario, ponen obstáculos”. “Con regalos fiscales a las grandes fortunas no se avanza en igualdad ni se reduce la brecha de la desigualdad”, concluyó tras ejemplificar que el gobierno de Juanma Moreno “deja de ingresar mil millones de euros con regalos fiscales a las grandes fortunas”.

Espadas volteó igualmente el argumento de que el PSOE ceda a las exigencias de los independentistas a cambio de sillones recordando los pactos entre PP y Vox. “¿Cómo se puede habar de transacciones después de lo visto después del 28-M?”. Frente a las críticas del “España se rompe”, el portavoz del PSOE en la comisión aseguró que su partido sería “garante de la unidad, la pluralidad y la constitucionalidad”.

Desde la perspectiva del PSOE-A reivindicó el proceso autonómico “simétrico y no asimétrico, como seguimos defendiendo”. Una apuesta respecto al debate territorial, que ahora se pone sobre la mesa si sale adelante la legislatura, “que sigue siendo la igualdad de oportunidades, la convivencia pacífica entre territorios como meta de ese proceso autonómico, compartido y no excluyente, en el que cabemos todos”. 

Ayuso marca el tono más duro del PP contra la amnistía: "Si esta indignidad triunfa, pronto no habrá españoles"

Desdeñar el debate

Impasibles y tratando de rebajar al máximo el tono para restarle importancia al debate de este jueves en el Senado. El PSOE enfocó con perfil bajo el debate y, tras las primeras intervenciones, fuentes de la dirección del grupo ironizaban con que “esto es Génova 2”. Un debate del PP y para el PP. Al menos, así lo quieren ver los socialistas para minimizar su impacto, conscientes de que el Senado, con mayoría del PP, busca convertirse esta legislatura en una suerte de Cámara de resistencia de Génova. Para Ferraz, una muestra más de que los populares están “parasitando” esta institución.

El 

presidente de Cataluña, Pere Aragonès

, fue el primero en intervenir y situó la amnistía como un primer paso para desembocar en un referéndum pactado. Desde Génova cargaron contra el PSOE, que limitará su protagonismo a la intervención del portavoz en la comisión, Juan Espadas, por “permitir que un dirigente de ERC sea quien verbalice en su nombre los puntos que están marcando las cesiones de los socialistas al independentismo”.

“Le recomendamos al PP tranquilidad, respeto institucional, que asuman el resultado electoral, y que no instrumentalicen las instituciones con el argumentario de la calle Génova”, responden fuentes de Ferraz. “Parasitar de esta forma el Senado, la FEMP o el CGPJ es un modus operandi que agradecemos que el PP muestre”, apuntan para fijarse también en “sus pactos de la vergüenza con VOX”. Todo ello, aducen, serviría “para que el país vea hasta que punto Alberto Núñez Feijóo ha asimilado un discurso ultra, lejos de aquel que decían moderado que vino a Madrid hace un año y medio”.

Los populares han centrado su discurso en la defensa de la igualdad entre españoles para repudiar las negociaciones de investidura con las formaciones independentistas. “Aragonés ha fijado la amnistía y el referéndum para la independencia de Cataluña como los puntos imprescindibles de su apoyo al candidato socialista. Sánchez ya ha defendido la amnistía y no faltará mucho para que lo haga con el referéndum”, advierten desde Génova.

Fuentes de la dirección socialista restan importancia a las palabras de Aragonès para enmarcarlas en su pugna electoral con Junts. “Nada nuevo” y “previsible”, zanjan para negar que su posición manifestada en la Cámara Alta pueda alterar las negociaciones para la investidura. Todo sigue igual, concluyen. Asimismo, incluso destacan el valor institucional de que el presidente de Cataluña acuda al Senado.

Los socialistas dejaron claro de antemano que este jueves en el Senado no entrarían a valorar ninguna negociación del Gobierno ni las conversaciones abiertas con el resto de grupos políticos para la investidura, sino de “la igualdad entre territorios”. Cualquier acuerdo, insisten, se adoptará “dentro del marco de la Constitución española”. La dirección federal del PSOE ha tratado de minimizar la entidad de un debate que considera una maniobra política más del PP para erosionar a Sánchez.