Aragonès retoma su agenda internacional con un viaje a Italia en pleno 12-O

Superado el parón obligado por las elecciones generales de julio, la pausa veraniega y el inicio del curso político, el 'president' Pere Aragonès retoma este miércoles su agenda internacional con un viaje institucional de dos días a Bolonia (Italia). La expedición tendrá un doble mensaje político: el primero, reforzar las alianzas con el gobierno de la Emilia-Romaña, región italiana donde gobierna el centro-izquierda en contraposición con el gobierno del país de la ultraderechista Giorgia Meloni. El segundo, simbolizar que ni el ejecutivo catalán ni su 'president' hacen vacaciones el 12 de octubre, festivo por ser el Día de la Hispanidad.

El 'president' Aragonès siempre ha querido que una de las prioridades de su mandato sea potenciar la agenda internacional de la Generalitat. Su principal aliado es que, como el Govern está en modo diálogo con el Estado, esto le abre más puertas en el extranjero que en los tiempos unilateralistas del 'procés'. Además, los dos últimos inquilinos de la Generalitat, Carles Puigdemont y Quim Torra, no cultivaron mucho esta faceta ya fuera por el conflicto con el Estado o por las limitaciones que impuso el coronavirus, lo que concede al actual Govern un buen margen para marcar diferencias.

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Con este contexto, Aragonès pone rumbo a Italia en un viaje que le llevará a mantener varias reuniones y visitas. La más destacada con Stefano Bonaccini, el presidente de Emilia-Romaña y, a su vez, presidente del Partido Democrático, el centro-izquierda italiano. Estos cargos le convierten en oposición a Meloni por partida doble: la región resistió a la ola de triunfos locales de la ultraderecha y el Partido Democrático busca ser la alternativa a los Hermanos de Italia, la formación de la primera ministra. El encuentro con Aragonès da continuidad al memorándum que firmaron los dos presidentes en 2022 para una colaboración entre administraciones.

El viaje del 'president' también incluye una visita al Tecnopolo, un centro tecnológico que colabora con el Supercomputing Barcelona Center. De hecho, allí está el supercomputador HPC Leonardo, uno de los tres mayores de Europa junto al MareNostrum barcelonés y el Lumi de Finlandia. El jueves, Aragonès se desplazará hasta la Universidad de Bolonia para reunirse con la consejera de Enseñanza, Universidades e Investigación de la región, Paola Salomoni. Es un centro con vínculos con universidades catalanas y en el que se imparte catalán.

Decimoctavo viaje

Que la agenda internacional ha sido una prioridad del 'president' lo demuestra el hecho que la expedición a Italia será el decimoctavo viaje como presidente. Han sido más de 65.000 kilómetros que tuvieron su apogeo en marzo del año pasado con una ruta de cuatro países de América Latina.

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En todo este tiempo, el principal triunfo que exhiben desde el Palau de la Generalitat ha sido recuperar la interlocución con la Comisión Europea, algo que no se daba desde el Govern de Artur Mas. Aragonès se ha reunido en Bruselas con el comisario europeo de Justicia, Didier Reynders, y con el comisario de Mercado Interior, Thierry Breton. También se ha visto con la presidenta de la comisión, Ursula von der Leyen, en este caso en un encuentro en Barcelona auspiciado por el Círculo de Economía. En el Palau de la Generalitat recibió al vicepresidente del ejecutivo comunitario, Margaritis Schinas.

El principal escollo que sigue teniendo la Generalitat es contactar con las esferas más altas de los gobiernos, ya que esto se sigue reservando a los Estados, mientras que los ejecutivos regionales lo tienen más complicado. Aragonès estuvo a punto de lograr subir este nivel con el presidente colombiano, Gustavo Petro, pero al final la cita se anuló. Sin embargo, el president sí que ha cultivado los contactos con algunos 'ex' de renombre como la exsecretaria de Estado de los Estados Unidos Hillary Clinton; el expresidente uruguayo Pepe Múgica y la expresidenta chilena Michelle Bachelet.