Jordi Pujol aconseja que "no se caiga en la candidez" al negociar con Sánchez

El expresidente de la Generalitat, Jordi Pujol, ha aconsejado al expresidente Puigdemont y a los que tengan que negociar la investidura de Pedro Sánchez en Madrid que "no se caiga en la candidez". En declaraciones en exclusiva a ElNacional.cat, Pujol hace esa recomendación sin citar directamente a nadie pero se interpreta como un consejo al líder de Junts, Carles Puigdemont.

Pujol aconseja a los negociadores independentistas que sean "exigentes" en el momento de llegar a un hipotético pacto, que sería el primer acuerdo al que llegaría Junts per Catalunya y más concretamente Carles Puigdemont con un Gobierno de España desde que en el 2017 se celebró el referéndum del 1 de octubre, la declaración unilateral de independencia y la aplicación del artículo 155 de la Constitución (que comportó la intervención de la Generalitat, la disolución del Parlamento y la convocatoria de elecciones anticipadas el 21 de diciembre de aquel año).

El que fue líder de CiU recuerda en la entrevista publicada por ElNacional.cat que esta formación pactó con Adolfo Suárez (UCD), con Felipe González (PSOE) y con José María Aznar (PP) y por eso tiene conocimiento de causa: "Con algunas cosas del Pacto del Majestic no nos engañaron y España actuó de acuerdo con aquellos criterios. Pero no todos". En este sentido, Pujol recuerda que después de la primera legislatura de Aznar (en la que el PP necesitaba apoyos parlamentarios) llegó la segunda en que, con mayoría absoluta, empezó una ofensiva recentralizadora.

Pero el contexto político actual es muy distinto al que envolvió el Pacto del Majestic de 1996 y Pujol advierte de que el independentismo debe buscar algo más que traspasos de competencias. En este sentido, la lengua ha ganado protagonismo en la negociación para Pujol, que prima el eje nacional frente al social, como heredero de su propio posicionamiento político.

Pujol hace en ElNacional.cat una reflexión sobre la inmigración y reconoce que su máxima de "es catalán aquel que vive y trabaja en Catalunya" requiere también de cierta revisión, en el sentido de que el Govern de Catalunya debe disponer de mecanismos adecuados para regular los flujos de migración y su integración laboral, social y lingüística.

Pujol aboga por que se alcance un pacto "con sentido de permanencia y de duración" y que "al cabo de 5, 10 o 20 años no se pueda decir que no sirve". Y concluye: "por lo tanto sí, con sentido histórico".