Tras la decisión del TGUE

Puigdemont no viajará a Estrasburgo sin que el Parlamento le garantice expresamente la inmunidad

La justicia europea retira la inmunidad a Puigdemont lo que abre la vía a que se tramiten nuevas euroórdenes

El Supremo prevé reiterar las euroórdenes sin esperar a que el TJUE resuelva el recurso de Puigdemont

Puigdemont durante su declaración por videoconferencia desde Bruselas

Puigdemont durante su declaración por videoconferencia desde Bruselas / ACN\POL SOLÀ

Ángeles Vázquez

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El expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont ha anunciado en Twitter que ni él ni el 'exconseller' que le acompañó en su huida de España Toni Comín se desplazarán al pleno del Parlamento Europeo hasta que la Cámara les garantice su inmunidad ante un hipotético arresto, después de la sentencia del Tribunal General de la Unión Europea (TGUE) que la semana pasada avaló la concesión del suplicatorio cursado por el juez Pablo Llarena para actuar penalmente contra ambos por su responsabilidad en el 'procés'.

En su tuit, Puigdemont se refiere a Comín, pero no a la otra eurodiputada que huyó de la justicia española, Clara Ponsatí, porque la situación de esta es distinta a la de sus compañeros, ya que al estar solo procesada por desobediencia el juez Llarena no cursará euroorden alguna en su contra, sin perjuicio de que haya ordenado su arresto si pisa España, para que sea conducida a su presencia y preste declaración indagatoria, diligencia imprescindible para poder continuar el procedimiento que se sigue contra ella.

Al ser un delito no penado con prisión nunca se la podrá encarcelar a la espera de juicio, a diferencia de lo que puede ocurrir con Puigdemont, Comín y el también en rebeldía Lluís Puig, aunque él no sea eurodiputado. Tras la derogación de la sedición y la reforma de la malversación los tres están procesados por desobediencia, pero también por malversación en su modalidad más grave, que puede estar penada con hasta 12 años de cárcel. De ahí que si fueran detenidos podrían ser encarcelados provisionalmente a la espera de juicio.

Garantías

Llama la atención que Puigdemont reclame garantías de la inmunidad para este lunes, cuando el juez Llarena aún está a la espera de que la fiscalía o la Abogacía del Estado, como acusación particular, insten la reactivación de la euroorden en su contra, ya que formalmente, pese a la sentencia, su situación sigue siendo la misma que antes de ella.

En su tuit, Puigdemont lamenta que debería "estar viajando hacia Estrasburgo para asistir al pleno" del Parlamento Europeo desde donde tiene fijada su residencia, en Waterloo. "Esperábamos una respuesta asertiva del Parlamento sobre nuestra inmunidad" tras la sentencia del TGUE, "pero todo lo que hemos recibido es que llegado el caso 'tomará todas las medidas disponibles para defender cualquiera de las inmunidades a las que puedan tener derecho en ese momento'”, se queja.

Para Puigdemont esa respuesta es tan ambigua como la propia sentencia, pero significa que "el Parlamento no garantiza, que llegado el caso no se utilice esta ambigüedad para practicar una detención como la de Alguer que, a diferencia de entonces, podría significar el traslado del proceso de extradición a Francia". Por ese motivo ni él ni Comín se desplazarán a la Cámara Europea hasta que esta les comunique "de forma clara que la inmunidad de desplazamiento queda garantizada".

En la propia sentencia y cuando se le devolvieron cautelarmente las prerrogativas del cargo tras su arresto en Cerdeña se afirmaba que los europarlamentarios tienen inmunidad para los desplazamientos que requiere su cargo, como sin duda es asistir a los plenos en el Parlamento Europeo. Además, el juez Llarena siempre ha tratado de compatibilizar la agenda europea con las citaciones judiciales que ha dirigido a Ponsatí para evitar impedirle que cumpla con sus obligaciones parlamentarias, aunque ella haya optado por no comparecer y forzar un nuevo arresto si viene a España.

Tras conocer la sentencia del TGUE, Puigdemont y Comín anunciaron que la recurrirán ante el Tribunal de Justicia de la UE (TJUE). El Supremo no tiene intención de esperar a que sea revisada a través de esta impugnación, lo que podría coincidir con la próximas elecciones al Parlamento Europeo.