El miércoles, en Vigo
Juan Carlos I disfruta en Londres de una cena con amigos y del Real Madrid
Sanxenxo, a punto para la visita del emérito



Pilar Santos
Pilar SantosPeriodista
Licenciada en Periodismo por la Ramon Llull.
Empezó en Barcelona en 1997 haciendo la agenda y las farmacias de guardia. Pasó por varias secciones antes de llegar a Política. En 2007, se trasladó a Madrid para cubrir la Moncloa con José Luis Rodríguez Zapatero y, después, con Mariano Rajoy. La información de Exteriores la llevó a más de 40 países. A partir de 2011 sumó la cobertura de la Zarzuela.
Tras la moción de censura a Rajoy, está centrada en el PP y la Casa del Rey.
Colabora en programas de análisis en Telecinco, RNE y Catalunya Ràdio.
Juan Carlos I está disfrutando esta noche del partido de vuelta de los cuartos de final de la Copa de Europa que el Real Madrid disputa contra el Chelsea en Londres (Reino Unido). El emérito ha entrado en Stamford Bridge con bastante tiempo después de pasar el día en la ciudad, a la que llegó el lunes directo desde Abu Dabi (Emiratos Árabes Unidos).
Finalmente, no ha almorzado con Carlos III, un encuentro que él, la semana pasada, comentó a sus amigos que se produciría, unos amigos convertidos en portavoces improvisados estos últimos años en los que la Zarzuela no quiere informar de las actividades del exjefe de Estado. Fuentes del Palacio de Buckingham, sin embargo, no confirmaron en ningún momento esa cita, tampoco este martes.
Juan Carlos I aterrizó en Londres el lunes en un avión privado prestado por la familia real de Emiratos Árabes Unidos, que es la que está ejerciendo de anfitriona y cuidándole todos estos años. Por la noche se fue a cenar al club privado Oswald, uno de los más de moda de la ciudad. El 'Daily mail' publicó el martes a primera hora fotografías del monarca saliendo del local, ayudado para andar, como es habitual, por dos personas.
Según los planes conocidos la semana pasada, el plan del emérito es coger de nuevo el avión privado el miércoles por la mañana y viajar a Vigo (Galicia) para entrenarse con el equipo con el que disputa las regatas.
Esta será su segunda visita a España desde que se fue a vivir a Abu Dabi para intentar mitigar el impacto en su hijo, Felipe VI, de las informaciones que se conocieron sobre su fortuna oculta. La primera visita a Sanxenxo, en mayo del año pasado, dejó un gusto amargo en el actual Rey. Su padre fue el centro de los medios de comunicación y ya ha quedado como imagen más potente de aquellos días el momento en el que una periodista le pregunta si va a dar explicaciones de sus negocios privados y él responde "¿Explicaciones de qué?" mientras suelta una carcajada. Varios ministros del Gobierno habían pedido públicamente que las diera. En esta ocasión, en cambio, el Ejecutivo central ha esquivado las preguntas de la prensa sobre la opinión que le merece este nuevo viaje del monarca y ha preferido no abundar en el origen de su fortuna.
El malestar de Zarzuela
La Casa del Rey ha hecho saber esta vez, además, que no estaba al tanto del desplazamiento a España, una manera de mostrar su malestar con el viaje. Ese gesto ha sido respondido de alguna manera por Juan Carlos, que esta vez no ha radiado a sus amigos sus movimientos. La confirmación de que se encontraba en la ciudad se tuvo esta vez por las fotografías del 'Daily mail', porque ninguno de sus habituales portavoces reveló su ubicación en un intento de rebajar la tensión con la Zarzuela.
Estos días en Sanxenxo, donde le esperan al mediodía este miércoles, el emérito quiere entrenarse con la tripulación de su barco, 'Bribón', para revalidar el título de campeones del mundo por el que tendrán que pelear el próximo mes de septiembre en la isla de Wight (Reino Unido). Su idea es estar con el equipo toda la semana y volver a Emiratos el domingo. Juan Carlos no tiene planes de pasar por Madrid esta vez, algo que sí hizo el año pasado.
En los funerales
Entonces estuvo unas horas en el Palacio de la Zarzuela, donde almorzó con su familia, con la reina Sofía con mascarilla guardando la distancia social porque había dado positivo por covid pocos días antes.
Felipe VI no quiso que trascendiera ninguna imagen del encuentro, el primero entre padre e hijo desde agosto de 2020. Después, se les ha visto a ambos juntos en algunas ceremonias en el extranjero, como en el funeral de Isabel II, en septiembre en Londres; y en el mismo tipo de ceremonia, en enero, en Atenas (Grecia) por la muerte del rey Constantino, hermano de Sofía.
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