Sánchez se vuelca contra la “política de bloques” para alcanzar un pacto de migración en la UE

Pedro Sánchez ha iniciado este martes en Chipre y Malta su gira europea que le llevará también a Italia con un discurso en contra de la “política de bloques”, con los países del sur por un lado y los del norte por otro, como forma de encarar el problema de la migración irregular. 

“Es fundamental avanzar en el pacto de migración y asilo. Tanto en su vertiente exterior, incrementando la colaboración con los países de origen y tránsito, como garantizando el equilibrio entre la responsabilidad y la solidaridad entre estados miembros. Los dos somos países de primera entrada. Construir puentes y evitar una política de bloques que en nada ayuda a resolver el desafío de la inmigración irregular. Es necesario que el Mediterráneo sea un mar de paz, libertad y prosperidad”, ha señalado el presidente español en Nicosia. 

Esta gira europea, la tercera de las cinco proyectadas antes de que España asuma en julio la presidencia de la UE, está centrada en la migración. Las diferencias políticas con los mandatarios que Sánchez verá en estos dos días son abundantes. El presidente chipriota, Nikos Christodoulides, que asumió el cargo a finales de febrero, es conservador. La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, con quien el presidente español se reunirá el miércoles, es ultraderechista: llegó al poder en octubre con un discurso durísimo contra los inmigrantes, similar al de Vox, con quien comparte importantes vínculos. Solo el primer ministro maltés, el laborista Robert Abela, es de la misma familia ideológica que Sánchez.

Pero con todos ellos España comparte una misma realidad en este ámbito, explican en la Moncloa: son países de frontera exterior dentro de la UE, y más allá de las divergencias (sobre todo, con Italia, que el líder socialista visitará este miércoles) quieren que los estados miembros se impliquen más ante la llegada de flujos. Los cuatro países, junto a Grecia, forman parte del MED5, un grupo de trabajo en el que participan, sobre todo, los ministros del Interior.

“Ha llegado el momento de alcanzar un acuerdo sobre el pacto de asilo y migración, una asignatura pendiente para la UE. La fuerza de un país como España, que entiende los retos de este problema, nos podrá ayudar”, ha dicho Christodoulides junto a Sánchez durante su comparecencia, que no ha admitido preguntas.

Divergencias

El presidente español busca en este gira escuchar a sus homólogos, conocer sus problemas y reivindicaciones para sumar apoyos ante las negociaciones sobre el pacto de asilo y migración. Sánchez intentará sellar este acuerdo durante la presidencia española, en el segundo semestre del año. O al menos, encarrilarlo para que fructifique en 2024, antes de las elecciones europeas. Pero los colaboradores del líder del PSOE reconocen que, ante las divergencias de posiciones, el objetivo resulta “muy difícil” de conseguir.

Las mismas fuentes, de hecho, consideran que hay más posibilidades de alcanzar un entendimiento sobre la reforma del mercado eléctrico, que Sánchez y Christodoulides también han abordado durante su encuentro en el Palacio Presidencial, en Nicosia. Los dos mandatarios han coincidido en que, respecto a la propuesta de la Comisión, conviene “subrayar más” la importancia de las interconexiones, así como que el acuerdo debería llegar antes de fin de año. Es decir, durante la presidencia española de la UE.

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