A los 87 años

Muere Fèlix Millet, el saqueador del Palau de la Música

El que fuera responsable de la entidad cultural fue el engranaje que permitió la canalización de comisiones a CDC, por lo que este partido fue sentenciado

Fèlix Millet, en los tribunales.

Fèlix Millet, en los tribunales.

J. G. Albalat

J. G. Albalat

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El exresponsable del Palau de la Música, Fèlix Millet, ha fallecido este jueves a los 87 años, según han informado fuentes conocedoras. Millet, condenado por el saqueo de la entidad cultural, cumplía una pena de nueve años y ocho meses de prisión por apropiarse más de 23 millones de euros a la entidad cultural (de los que solo ha devuelto la mitad), y ha fallecido en la residencia donde vivía y donde regresó hace pocos días después de idas y venidas del centro penitenciario de Brians.

Millet fue durante una época el engranaje de la financiación ilegal de Convergència Democràtica de Catalunya (CDC) al haber usado el Palau como canalizador de las comisiones de Ferrovial hacia este partido a cambio de obras públicas de la Generalitat o de las instituciones que controlaba, tal y como él mismo confesó. Como aseguró el fiscal Emilio Sánchez Ulled durante el juicio celebrado en marzo de 2017, por el saqueo: "Parece ser, y es triste, que la bandera justifica cualquier atropello con la cartera". En su opinión, la entidad cultural "era la cañería por la que transitaba el dinero" que la constructora, que fue exculpada, desembolsaba a la extinta formación política. La condena rompió los cimientos del denominado 'oasis catalán'.

La Conselleria de Justícia flexibilizó en enero de este año el régimen penitenciario del exresponsable del Palau de la Música y le permitió cumplir el tercer grado en una residencia privada elegida por su familia, sin tener que pernoctar en prisión, debido a los problemas de salud que padecía. Sin embargo, el 16 de febrero y a causa de un recurso del fiscal, volvió a ingresar en la cárcel. A los pocos días, el juez le avaló de nuevo que fuera otra vez al geriátrico, donde ahora ha fallecido. Desde octubre del año pasado ya disfrutaba del tercer grado penitenciario o de semilibertad por su delicado estado de salud y "razones humanitarias" y solo acudía al centro penitenciario a dormir de lunes a jueves.

Causas pendientes

Millet ha fallecido sin devolver al Palau de la Música los millones de euros por los que fue condenado a pagar y las multas fijadas en sentencia. Hasta la fecha, la entidad ha recuperado únicamente 12 de los 23 millones de euros gracias a los bienes embargados a los acusados. Además, Millet ha muerto con dos causas abiertas por ocultar a la justicia ingresos procedentes de alquileres y por la desaparición de varios objetos de valor de su domicilio, presuntamente con la intención de sortear su obligación de indemnizar al auditorio barcelonés por el expolio que perpetró durante décadas. En una de ellas, la fiscalía le reclamaba cuatro años de cárcel por esconder piezas decorativas y otros bienes que tenía embargados.

La condena de Millet y el que fuera su mano derecha, Jordi Montull, no está extinguida. El Tribunal Supremo, en abril de 2020, ratificó las penas impuestas por la Audiencia de Barcelona casi dos años antes. Básicamente confirmó el comiso de 6,6 millones de euros a CDC por tráfico de influencias y las penas impuestas a los máximos responsables de la institución: 9 años y 8 meses de prisión y multa de 4,1 millones para Millet y 7 años y medio de cárcel y multa de 2,9 millones para Montull, además de devolver los millones saqueados. Los pocos cambios que introdujo consistieron en rebajar en medio año la condena de la exresponsable financiera del Palau Gemma Montull, que no ha ingresado en prisión, y la del extesorero de CDC Daniel Osàcar, al que en septiembre del 2020 le dieron el tercer grado.

Gastos particulares

Millet y Montull pergeñaron un entramado delictivo alrededor del Palau de la Música que les permitió desviar o apoderarse de más de 23 millones de euros entre el 2000 y el 2009 (sin contar las comisiones por los tejemanejes con CDC, valorados en 6,6 millones). Amos y señores de la entidad cultural, movieron fondos a su antojo entre la fundación, el Orfeó y la Associació del Cor de Cambra.

Entre el uso y disfrute de esos fondos quedó acreditado que los dos antaño prohombres de Barcelona cargaron al Palau de la Música prácticamente tres millones de euros por las obras efectuadas en sus domicilios o de sus familiares. Constan por ejemplo reformas en las casas de Millet en Barcelona y L'Ametlla del Vallès, en la de Teià de Montull o en la de su hija, quien camufló muchos de los pagos en facturas falsas bajo un archivo en su ordenador que llevaba por título 'Los Vikingos' y que permitió a los magistrados tirar de ironía en su sentencia: "Resulta significativo que decidiera utilizar para identificar el contenido de dicho archivo el nombre de antiguos pueblos nórdicos famosos por sus saqueos y pillajes".

Los jueces también consideraron también probado un dispendio de 648.000 euros que los dos principales condenados dedicaron a viajes, con destinos tan variopintos como México, Galicia, El Cairo, Kenia, Nápoles, Maldivas, Santo Domingo, San Petersburgo, Polinesia. A lo que hay que sumar donaciones a políticos exconvergentes (Àngel Colom y Esteve Escuer) y el abono de 164.269 euros a cargo del Palau por los "ostentosos enlaces" de las dos hijas de Millet en el 2000 y el 2002.