Reforma del TC

Feijóo pide a Sánchez renunciar a su reforma penal para volver a la negociación del CGPJ

El líder del PP plantea "como salida" a la crisis institucional que Sánchez renuncie a derogar el delito de sedición y reformar la malversación para volver a sentarse a negociar el Consejo General del Poder Judicial

El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo.

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El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, propone "como salida a la crisis institucional" desatada en España en las últimas horas una negociación completa con el Gobierno en la que Pedro Sánchez debe renunciar a la reforma del Código Penal que se está tramitando y que esta semana llega al Senado (es decir, que no haya derogación del delito de sedición ni reforma de la malversación, y que incluya la tipificación del referéndum ilegal) a cambio de que los dos grandes partidos vuelvan a sentarse para abordar la renovación del Consejo General del Poder Judicial, retomando la reforma legal que ya discutieron hace meses en la que los jueces eligen directamente a los jueces. 

Una especie de paquete por el que el líder de la oposición vincula toda la agenda legislativa de las últimas semanas del Ejecutivo “hecha a toda prisa y sin los informes correspondientes” a la negociación del Poder Judicial, que sigue pendiente y que el Gobierno insiste en demandar como exige la Constitución, con el objetivo también “de que Sánchez pare la escalada de cesiones al independentismo” de inmediato.

Feijóo compareció en la sede nacional de su partido, después de que lo hubiera hecho Sánchez en Moncloa, y horas más tarde de que el pleno del Tribunal Constitucional aceptara las medidas cautelarísimas de los populares para evitar que el Senado vote las enmiendas relativas a acelerar los nuevos nombramientos del propio TC dentro de una reforma del Código Penal con la que no guarda relación alguna.

La cara de satisfacción de Feijóo se hizo visible desde el primer momento y comenzó su intervención pidiendo al Gobierno “que rebajara ya la escalada verbal iniciada por el propio Sánchez hablando de complot en España”. “Basta ya de hablar de golpes de Estado, de intrigas contra la democracia, de llamar fachas con toga a los magistrados, de decir que quien no está perfectamente alineado con las tesis de Sánchez es un conspirador o un fascista, y basta de cuestionar los procedimientos que hacen de nuestro país una democracia liberal a la altura de las mejores del mundo”, dijo el líder conservador ante los principales cargos de su dirección. En la primera fila atendían Cuca Gamarra, Elías Bendodo, Esteban González Pons y Carmen Navarro.