Lambán suspende su cita con Aragonès y la candidatura olímpica queda en el aire

No habrá reunión entre Pere Aragonès y Javier Lambán. El presidente de Aragón comunicó este jueves por la tarde al jefe de la Generalitat que el encuentro que iba a tener lugar el viernes en Balaguer para hablar, entre otras cosas, de los Juegos Olímpicos de 2030 no va a tener lugar por las "importantes diferencias" entre ambos.

El presidente de Aragón considera que "es mejor aplazar" la reunión "para no dar ningún paso atrás en un proyecto que beneficiará a todo el territorio del Pirineo". Pese a esta puntualización, la anulación deja en el aire la candidatura olímpica.

El Govern mantiene su intención de llevar a cabo una candidatura propia para los Juegos Olímpicos del 2030, sin entrar a discutir cualquier tipo de cogestión, pero abierto a la "colaboración técnica" con Aragón. La Diputación General de Aragón (DGA) por su parte, le señal cuáles son las indicaciones del Comité Olímpico de España (COE) y del Gobierno. Por eso se aguardaba con impaciencia el modo en que iban a tratarse Aragonès y Lambán, y si iban a abrir un camino único y conjunto hacia el año 2030. Pues bien, de momento este viernes no habrá reunión.

La Generalitat ha recibido con "asombro" la decisión de Lambán y la califica de "irresponsable" aunque piensa seguir tanto con los trabajos técnicos como con la preparación de la consulta ciudadana. En cualquier caso, la parte catalana ponía el acento de la reunión en asuntos al margen de la candidatura. "Se trataba del primer encuentro entre los dos presidentes con temas sobre la mesa como los servicios compartidos, los fondos Next Generation, temas industriales y del sector agroalimentario, además de los Juegos Olímpicos de invierno", sostenían fuentes del Govern.

A mediodía se estaban cerrando los detalles entre ambos gobiernos, los asuntos y los modos en los que avanzar, sobre todo, en el conflicto olímpico. A primera hora de la mañana, Lambán preparaba con tacto la cumbre con su homólogo catalán absteniéndose de emitir "cualquier tipo de juicio" que entorpeciera la reunión. Según fuentes conocedoras de las conversaciones entre los respectivos equipos, ha sido en el momento en que la parte catalana ha transmitido que el mensaje que Aragonès trasladaría en persona a Lambán sería el mismo que el expresado horas antes en el Parlament y, días antes, por la 'consellera' de Presidència Laura Vilagrà, cuando la parte aragonesa ha anulado la cita. Es decir, la candidatura es y será catalana.

Presión interna a Lambán

Distintos partidos le habían pedido al jefe del Ejecutivo aragonés estos días que fuese "contundente", sobre todo el Partido Popular, que solicitó que se comportara con el 'president' "con la misma vehemencia" que lo hace en las redes sociales. "Mi posición respecto a la defensa de los intereses de Aragón no admite lecciones de nadie, y mucho menos de ese partido (PP)", ha respondido este jueves Lambán.

"Voy a Catalunya a reanudar una relación institucional que se interrumpió hace seis años, algo que no es bueno. Son muchos los asuntos que tenemos que tratar con los catalanes, hermanos de historia, de cultura, vecinos geográficamente y compartientes de muchísimos intereses económicos y sociales", ha dicho Lambán esta mañana, que tenía una conversación pendiente con Alejandro Blanco, presidente del COE.

"Me consta que ayer Alejandro Blanco, después de estar anteayer en Zaragoza, visitó a responsables políticos catalanes. Tengo pendiente hablar con él para que la reunión de mañana sea fructífera en este aspecto concreto”, ha explicado el presidente, que pensaba plantear al 'president' catalán la posición de Aragón "de alineamiento con el COE, que lidera la candidatura" y que ha dicho "con claridad" cómo tiene que producirse la andadura de esa candidatura.

Fuentes del Govern explican que la reunión de Vilagrà con Blanco, "circunscrita al ámbito técnico", fue muy positiva. Eso sí, Vilagrà insistió en la idea en que Catalunya no piensa ceder 'soberanía' de su candidatura. Como mucho, colaboración "técnica".