Puigdemont pone condiciones para un eventual apoyo de JxCat a Aragonès

En campaña electoral ningún partido responde a la pregunta de qué hará si pierde. Todos quieren hablar en positivo de sus expectativas. Pero todos tienen también fijados sus planes b. También Junts per Catalunya ha analizado internamente, entre dirigentes, qué hacer si Esquerra les vence.

La respuesta a esta pregunta, en público, es nebulosa, pero deja entrever que la formación de Carles Puigdemont vendería caro su 'sí' a una hipotética investidura del rival republicano, Pere Aragonès. No se descarta, incluso, pasar a la oposición. En una entrevista a EL PERIÓDICO, la candidata Laura Borràs, se limitó a afirmar: "Tendremos que ver qué es lo que pasa porque no repetiremos los errores cometidos". Es decir, pondrían condiciones y tratarían de fijar "nuevas bases" para la relación entre dos socios cuyos líderes llevan años enfrentándose a cara descubierta.

Nuevo reparto del Govern

Una de estas nuevas bases, sin duda, sería un reparto diferente del poder en el Govern. Este jueves, el 'exconseller' Toni Comín, en un acto de campaña sobre salud, pedía abiertamente que la Conselleria de Salut pase a manos de JxCat e integraría la atención sanitaria y la social.

En este contexto, se entiende que también Puigdemont pusiera este jueves condiciones al posible apoyo a ERC. En una entrevista en RAC-1, avisó de que se debería lograr un pacto "de mínimos". Y puso como ejemplo: "Si quieren ser muleta del Gobierno español para facilitarle cosas, no estaremos”, aseveró, “para que no haya duda al respecto”. Puigdemont que está centrando sus mítines en atacar la actitud del partido de Oriol Junqueras en Madrid, exigió que el nuevo Govern se centre en la consecución de la independencia y sostuvo la tesis de acabar proclamando de nuevo la independencia si el secesionismo logra el 50% de los votos. El líder de ERC sigue rechazando, en cambio, proclamaciones que "duren pocos segundos".

Aragonès no se imagina un veto de Junts

Aragonès replicó desde la ACN que no quería llevar a cabo una campaña de "ataques mutuos" con JxCat y que no "le cabía en la cabeza" que un partido que se define como independentista no le dé apoyo. "Hay dos opciones, Salvador Illa, a quien Cs y Vox ya han ofrecido los votos y ERC, si gana las elecciones", explicó.

Por su parte, Borràs afirmó que se malinterpretaron sus palabras en las que afirmó que Junqueras fue condenado por "corrupción". ERC dio por zanjada la polémica.

Tampoco en el PDECat creen que Junts pueda permitirse el lujo de quedar fuera del Govern aunque ERC les supere en las urnas. "Quedarse fuera sería la muerte, para ellos", asegura un dirigente posconvergente.