Un portavoz del PP en el Congreso admite "falta de previsión" del Gobierno para impedir el 1-O

La Guardia Civil abandona Calella, entre las protestas de los vecinos.

La Guardia Civil abandona Calella, entre las protestas de los vecinos.

P. M.

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El portavoz del PP en la comisión de Interior del Congreso, José Alberto Martín-Toledano, ha admitido este miércoles que pudo haber existido "falta de previsión" por parte del Gobierno a la hora de impedir el 1-O, pero ha achacado los posibles "errores" a la "desproporción de la traición" de la Generalitat. 

El diputado conservador, el único hasta ahora que ha admitido fallos por parte del PP, ha respondido así ante las críticas vertidas por las asociaciones de la Guardia Civil contra el Ejecutivo central por "echarles a los pies de los caballos" en Catalunya.

Hasta siete sindicatos del Instituto Armado habían sido citados a la comisión de Interior de la Cámara baja para hablar de sus condiciones laborales. Si bien, la mayoría de sus líderes han pedido perdón a sus señorías porque, debido a lo ocurrido en Catalunya, donde tras las cargas policiales del 1-O se están produciendo escenas de acoso y rechazo a las fuerzas de seguridad nacionales, "no tenían el cuerpo para hablar de otra cosa".  

Los representantes sindicales culparon de la situación, que para los agentes retrotrae a los peores años de la lucha contra ETA en el País Vasco,  a tres estamentos: el Gobierno central, la Generalitat y las entidades independentistas y los Mossos.

Las imágenes "trucadas"

Las acusaciones contra el Govern, el ámbito soberanista y la policía catalana eran más previsibles. Así, el vicepresidente Asociación Española de la Guardias Civiles, Raú Lobato, criticó por ejemplo la difusión de "imágenes trucadas" sobre las cargas el 1-O que, en su opinión, han servido como munición para que muchos catalanes "acosen, agreden e insulten" a los guardias civiles desplegados en Catalunya. Además, consideró "incitación al odio" las reflexiones de Carles Puidemont y muchos alcaldes y señaló que los Mossos hicieron el pasado domingo "dejación de funciones" cuanto no "entorpecieron" el cumplimiento de las órdenes judiciales.

Asimismo, la asociación ASIGC denunció que la policía catalana no está "protegiendo" a los agentes desplegados "de la humillación" de los últimos días mientras que ASES (escala de suboficiales) mostró su "alegría" por la imputación por sedición del 'major' Josep Lluis Trapero.  

Pero también hubo reproches al Gobierno central. El presidente de ASES, José Francisco Silva, fue el que señaló que en Catalunya "se les ha echado a los pies de los caballos y se les está utilizando como peones en una partida de ajedrez". Además, manifestó que los agentes le trasladan que el 1-O hubo una "falta de previsión" incomprensible con los "medios de que dispone el Estado de Derecho para anticiparse".