Podemos denuncia la acción de la "máquina del fango" en el 'caso Espinar'

La dirección de Podemos atribuye a la "máquina del fango" la difusión de la información sobre el piso protegido que el senador Ramón Espinar vendió en el 2010Ramón Espinar. La expresión alude al intento de condicionar, señala, el proceso de primarias para renovar la dirección del partido morado en Madrid, en el que Espinar, candidato pablista, se enfrenta a la errejonista Rita Maestre.

El propio secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, ha usado la etiqueta #maquinadelfango en Twitter, una de las tendencias del día en la red social.

En la misma línea, su jefa de gabinete y portavoz adjunta de Unidos Podemos en el Congreso, Irene Montero, ha avisado de que "cuando se activa la máquina del fango", los seguidores de su partido saben "cómo responder". 

También la rival de Espinar en la pugna por las riendas del partido en la Comunidad de Madrid le ha apoyado. Maestre ha respondido, a preguntas de los periodistas, que cree en las palabras del senador, quien, ha dicho, "ha dado muchas explicaciones" y ha tardado solo "dos horas", tras saltar la información, en comparecer. "Es mi compañero y me creo sus explicaciones", ha dicho.

CRÍTICAS DESDE LA CÁMARA ALTA

Desde los otros grupos del Senado le han llovido críticas al candidato pablista, también diputado en la Asamblea de Madrid. Los socialistas le han exigido aclaraciones "convincentes" o, de lo contrario, aseguran, se plantearán pedir formalmente su dimisión. Para el senador del PSOE por Madrid David Lucas, tras la rueda de prensa de Espinar, siguen surgiendo "muchísimas dudas".

El grupo popular en la Cámara alta, mientras, le ha acusado, a través de una nota, de "vender ejemplaridad y moralidad", pero "beneficiarse de privilegios para acceder a una vivienda protegida y especular con ella". 

Quien no se ha pronunciado públicamente hasta el momento sobre el caso ha sido el coordinador federal de Izquierda Unida y compañero de grupo de los morados en el Congreso, Alberto Garzón. Sí lo han hecho los exlíderes de IU Gaspar Llamazares y Cayo Lara, a quienes las explicaciones de Espinar no han convencido.