DEBATE DE INVESTIDURA

"'Bullying'" a Podemos en el Parlamento andaluz

Teresa Rodríguez reprocha la actitud de los diputados durante su discurso, que considera "peor que en el instituto"

Teresa Rodríguez (Podemos) interviene en el debate en la Cámara andaluza.

Teresa Rodríguez (Podemos) interviene en el debate en la Cámara andaluza.

JULIA CAMACHO / SEVILLA

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Los diputados de los partidos tradicionales del Parlamento andaluz han intentado hacer de su veteranía una ventaja, provocando que la llegada de los representantes de Podemos y Ciudadanos --novatos en estas lides-- no haya sido tan idílica como esperaban. Son tácticas de político curtido para desconcentrar a su adversario, pero algunos de los comentarios rozan el "'bullying' de instituto", según ha afeado este jueves la secretaria general de Podemos en Andalucía y portavoz en la Cámara, Teresa Rodríguez.

Los comentarios con desdén, cuchicheos y las interpelaciones por lo bajini, incluso los insultos, están a la orden del día en todas las cámaras de representación, reconocen algunos diputados. Pero en algunas se distinguen con mayor nitidez, como ocurre en Andalucía, donde las bancadas se distribuyen en un pasillo en forma de "U" muy cerrada y quedan a muy escasa distancia del atril desde donde se producen las intervenciones. De esta forma, Rodríguez pudo oír con total claridad los 'piropos' que le lanzaron los que prestaban atención (porque muchos se dedicaron a mirar el móvil sin siquiera atender su discurso) desde ambas bancadas, socialista y popular, dado que IUCiudadanos y su grupo quedan justo enfrente.

"CÁLLATE, BONITA"

"No tienes ni pu... idea", "cállate, bonita" o "¡anda ya!!" fueron algunas de las lindezas que tuvo que aguantar y que provocaron que, además de comparar la situación con el instituto en el que ejercía de profesora, pidiera ayuda al presidente del Parlamento, quien a la petición de silencio añadió un "no interpele usted a sus señorías". Al terminar su intervención, hubo alguna diputada que le espetó: "acostúmbrate, esto no ha sido nada", al que la líder de Podemos respondió: "¿y por qué tengo que acostumbrarme?".

En una entrevista en RadioCable, la diputada de Podemos insistía en que le comentaron que "al parecer es lo normal". "Pero si yo lo hubiera sabido habría ido un poco más preparada para enfrentarme a ese 'bullying', que parecía 'bullying' de instituto". Y contaba su esfuerzo para conseguir que sus alumnos en el instituto respetaran en clase de lengua y oratoria los turnos de palabra y los planteamientos del otro aunque no coincidieran con ellos, algo que ha echado de menos entre sus señorías.

"ALERGIA A LOS CAMBIOS"

Así, lamentó que en "el máximo órgano de debate de un territorio" suceda "exactamente lo contrario". En su cuenta de Twitter, Rodríguez abogó el miércoles por cambiar una actitud que en las redes sociales, poco después, atribuyó a que "la vieja política tiene alergia a los cambios". "No les gustan, les molestan, no pueden evitarlo, les pica", escribió.

"Parece que entre quienes llevan tiempo trabajando juntos se dan estos espacios de informalidad y de falta de educación y cierto pitorreo", reprochó en la radio. Y añadió: "parece que uno se lo tiene que pasar bien en el pleno riéndose del último que llega, de la última ocurrencia del que vino o del chiste que trae su señoría".