El PSOE aparta a López Aguilar al ser imputado por malos tratos

Juan Fernándo López Aguilar, exministro de Justicia y uno de los impulsores de la ley contra la violencia machista del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, ha sido imputado por presuntas lesiones físicas y verbales a su mujer, Natalia de la Nuez, de la que se encuentra en trámites de separación. Él asegura que es inocente, que todo se debe a un castigo de su hasta ahora pareja por querer divorciarse. El PSOE no entra en su responsabilidad, pero en aras de su «elevado compromiso» en una materia tan sensible como esta decidió ayer suspenderle de militancia y apartarle de sus funciones en la Eurocámara, donde actualmente ocupa un escaño. López Aguilar dejará de formar parte del grupo socialista e ingresará en el de los no inscritos en el Parlamento comunitario.

«Ha sido muy doloroso ver que personas a las que has querido y por las que has trabajado te amenazan de que si culminas la ruptura matrimonial sufrirás, como estoy sufriendo ahora, la agresión a mi honorabilidad, credibilidad y trabajo político de tantos años», explicó el exministro a través de un comunicado emitido en la noche del pasado lunes. En alusión a una denuncia previa que presentó en enero el hijo de su mujer, fruto de una relación anterior, y que luego retiró, el dirigente socialista también se declara «víctima de otra denuncia falsa».

La fiscalía, sin embargo, ha visto «indicios iniciales de la presunta comisión de uno o varios delitos relativos a la violencia de género y en el ámbito familiar» después de que la policía investigara la relación entre ambos. Las diligencias aportan testimonios de la hermana de la mujer de López Aguilar, así como de varios vecinos. Al estar el exministro aforado, será el Tribunal Supremo quien decida en los próximos días si inicia una investigación, que pasaría, entre otras medidas, por la declaración de López Aguilar.

Tras conocer la imputación el lunes, el PSOE convocó ayer a su comisión de garantías de igualdad. La secretaria de los socialistas en esta materia, Carmen Montón, ya había avisado a primera hora de la mañana que el exministro podía ser suspendido cautelarmente de militancia, así que este anunció poco después que daba ese paso por su propio pie. Dijo que no quería perjudicar al partido y que la baja voluntaria estaba dentro de sus «obligaciones».

APLICACIÓN DEL CÓDIGO ÉTICO / Pero el PSOE no solo se limitó a retirarle provisionalmente el carnet del partido, sino que también anunció que López Aguilar quedaba apartado del grupo socialista en la Eurocámara, donde forma parte de la Comisión de Libertades Civiles, Justicia y Asuntos de Interior. Tal y como establece el código ético de los socialistas, que menciona expresamente en su articulado los casos de violencia machista, el exministro regresará al PSOE si es absuelto, mientras que si resulta condenado será expulsado definitivamente y se le pedirá que abandone su escaño. López Aguilar, sin embargo, no estará obligado a dejar su puesto parlamentario, ya que este es personal y no se debe al partido que representaba hasta ahora.

«No es que sus explicaciones no nos convenzan, sino que nuestro compromiso contra la violencia machista es muy elevado -dijo sobre este caso el portavoz socialista en el Congreso de los Diputados, Antonio Hernando-. No podemos pedir ese compromiso al Gobierno y a la sociedad si no somos los primeros en responder». Montón, por su parte, recordó que las denuncias falsas por estos delitos son muy escasas. Representan el 0,01% del total.