ERC ensancha su ventaja sobre CiU tras la confesión de Pujol
A la espera de que el desenlace del 9-N pueda sacudir de nuevo las piezas del tablero político catalán, ERC sigue con el control absoluto de la partida. La primera encuesta de la Generalitat después de la confesión del expresident Jordi Pujol ha desplomado un poco más las expectativas electorales de CiU, que ha visto cómo su brecha con los republicanos se hace cada vez más grande. Justo antes de que Artur Mas firmase el decreto de convocatoria de la consulta, el partido de Oriol Junqueras aventajaba en 6,7 puntos a los nacionalistas.
El sondeo tan solo refleja la intención directa de voto, es decir, el voto sin cocina previa y sin proyección de escaños, lo que impide saber si ERC ganaría hoy unas elecciones y, en tal caso, qué diferencia le sacaría a CiU. El estudio se realizó con 800 entrevistas del 19 al 25 de septiembre, pasado el debate de política general y aprobada la ley de consultas. Los republicanos obtienen un 19,8% de los votos (un punto menos que hace un año), mientras que CiU se queda con el 13,1% (cuatro puntos menos).
En esta tendencia influye la buena valoración de Junqueras, que saca mejor nota que Mas, pese a que los catalanes opinan que fue el president quien salió victorioso del debate parlamentario, en el que ambos protagonizaron un tenso careo. El electorado de Esquerra sigue siendo el más movilizado. Tres de cada cuatro votantes en el 2012 mantendrían ahora su respaldo y recibiría, además, el apoyo de dos de cada 10 votantes de CiU. La federación nacionalista solo logra fidelizar al 42% de su electorado y una cuarta parte de sus votantes están hoy indecisos.
Como sucede desde hace tiempo, la batalla por la tercera plaza la protagonizan el PSC y Ciutadans. Los socialistas, con el 5,8%, parecen haber taponado parte de sus heridas y solo han cedido dos décimas en el último año, nuevamente convulso y con cambio de líder incluido. El partido de Albert Rivera, con el 5,3%, le sigue al acecho nutriéndose de dos de cada 10 votantes del PP, pero tampoco ha podido librarse de la erosión del sistema de partidos y ha perdido medio punto en un año.
CAÍDA DE ICV-EUiA / La otra gran pugna es la que libra la izquierda alternativa. Podemos irrumpe con fuerza en un sondeo del CEO y queda en empate técnico (4%) con una ICV-EUiA que retrocede punto y medio después de que la marca de Pablo Iglesias le arrebate el 11,5% de los votos. El PSC y el abstencionismo son los otros caladeros del partido lila, que también supera en un punto a la CUP (2,9%). Podemos y la CUP son las únicas fuerzas que crecen en la encuesta, pero no lo hacen tanto como los indecisos, que se disparan hasta el 23%, cinco puntos más que hace un año.
La encuesta refleja que el respaldo a la consulta del 9-N se mantiene por encima del 70% y que, a pesar de la posición contraria de sus direcciones, un 41% de los votantes del PSC y un 28% de los electores de Ciutadans apoyan el plebiscito. En el caso de Podemos, dos de cada tres votantes defienden la consulta.
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