La situación de las finanzas públicas

Mas asume ante sus alcaldes que Catalunya puede ser intervenida

El presidente del grupo parlamentario de CiU, Oriol Pujol, y la presidenta del PPC, Alicia Sánchez-Camacho, ayer en los pasillos del Parlament.

El presidente del grupo parlamentario de CiU, Oriol Pujol, y la presidenta del PPC, Alicia Sánchez-Camacho, ayer en los pasillos del Parlament.

FIDEL MASREAL / Barcelona
J. RUIZ SIERRA / Oporto (Enviado especial)

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Sábado, 28 de abril. Ayuntamiento de Sant Martí de Llémena. Artur Mas interviene ante el consejo de alcaldes del Gironès, a puerta cerrada. En un tono serio y grave, elpresidentdesgrana con todo lujo de detalles la dramática situación de las finanzas de la Generalitat. Con idéntica firmeza, relata la amenaza que se cierne sobre el autogobierno catalán. Y se muestra dispuesto a tomar decisiones «trascendentes».

Es solo un ejemplo de lo que en CiU empieza a ser un secreto a voces: la intervención de Catalunya por parte del Estado es posible. Lo afirman variosconsellersconsultados al respecto. «Es posible, aunque no probable», puntualiza uno de los miembros del Ejecutivo catalán. Los adjetivos van agotándose cada día que pasa, y Mas está decidido a dar pasos adelante. Así lo aseveró también, por poner otro ejemplo, en un reciente coloquio del Cercle Cecot Joves Empresaris, en Terrassa.

Ayer, en la sesión de control en el Parlament, y respondiendo a Joan Puigcercós (ERC), Mas afirmó que la creación de una Hacienda catalana «es irrenunciable, por la vía del pacto [fiscal] o por la vía de la propia decisión», lo cual, asumió, conduce a Catalunya «a un escenario desconocido». Esa es la pregunta que se hace más de unconseller:¿Cómo piensa llevar a cabo Mas su plan? ¿Seguirá una mayoría social la propuesta de pasar a ingresar sus declaraciones de renta y de IVA en una institución catalana, en lugar de en la estatal?

RUPTURA INÉDITA / Si se ejecuta este paso inédito de ruptura a través de una ley del Parlament, Puigcercós afirmó a este diario, en los pasillos de la Cámara: «Si Mas va a la cárcel por ello, yo iré con él». Otra muestra de la gravedad que se palpa en el ambiente. Al desafío delpresidentquiso contestarle con otro, en el pleno, la líder del PPC, Alicia Sánchez-Camacho. Afirmó que las pensiones que pagan los catalanes dependen de la inyección mensual de las arcas estatales. Mas le recordó que las pensiones se sostienen gracias a las cotizaciones de los trabajadores, y no mediante los impuestos. Pero la velada amenaza de Camacho no pasó desapercibida en las filas de CiU y en el Govern, que constata que Rajoy no piensa ceder ni un milímetro respecto a las reiteradas demandas catalanas de oxígeno. «Están atenazados por su propia situación, viven de facto intervenidos por Bruselas y no aflojan en nada», afirma un destacado miembro del Gabinete de Mas.

En este contexto, elpresidentcombatió a quienes exigen el final de los ajustes alertando de que «sin recortes ni impuestos, Catalunya se iría a hacer puñetas». Justificó también el pago de peajes -«Si no hubiera, pensionistas sin recursos pagarían por los demás», adujo-, pero denunció otra vez el agravio catalán, y que ha reprochado por carta a Rajoy. Este frente de batalla se formalizó ayer con la decisión del Parlament de llevar al Congreso la creación de un fondo de rescate de peajes para Catalunya, medida planteada ya en el 2004 y que caducó por falta de voluntad política, informaCristina Buesa.

PRESIÓN SIN FIN / Lo cierto es que los mensajes que envía el Gobierno central, en forma de presión, justifican los temores de Mas. En Oporto, Rajoy desdeñó el órdago que plantean las autonomías no gobernadas por el PP contra sus recortes, con recursos al Tribunal Constitucional, y les pidió que centren todos sus esfuerzos en cumplir el 1,5% de objetivo de déficit. «Puedo asegurar que no estoy preocupado por esos anuncios [los recursos al TC], y lo digo sinceramente», advirtió el presidente del Gobierno. La soga sigue anudada al cuello y cada vez aprieta más.