Mirador

Un nuevo pacto del Majestic pero sin foto

SAÜL GORDILLO

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La noche del pacto del Majestic conJosé María Aznar, el entoncespresidentJordi Pujolse percató de la trascendencia del acuerdo CiU-PP ante tanto espectáculo mediático. Demasiadas cámaras y periodistas para captar una encajada de manos entre el líder de CiU y elAznaren minoría de la primera legislatura. Fue tan excesiva la gesticulación que un astutoPujolno pudo ahorrarse durante la cena el comentario aJoaquim Molins: «¿No crees que nos estamos pasando?». La fotoPujol-Aznaren el hotel Majestic acabó pasando factura a CiU en la recta final del pujolismo cuando la segunda victoria deAznar, entonces ya con mayoría absoluta, cogió a contrapié una coalición nacionalista que perdía votos por el Plan Hidrológico Nacional y el desgaste de dos décadas de poder en la Generalitat. La puesta en escena y los detalles de aquella famosa noche de 1996 en el lujoso hotel figura en el tercer y último volumen de las memorias dePujol, que llegará a las librerías precisamente el 23-F.

La fecha, símbolo de involucionismo para el autogobierno catalán y para la democracia española en general, es una metáfora prometedora del epílogo con quePujolcierra los tres volúmenes escritos a cuatro manos, con la ayuda del periodista Manuel Cuyas. ¿Será un texto del independentista de epílogo en qué se ha convertido el propioPujol? En todo caso, la editorial promete «revelaciones impagables» del pacto conAznar, coincidiendo con el primer aniversario del delfínArtur Mascomopresident, en minoría y gracias al socio preferente que está siendo nuevamente el PP. La diferencia entre el primero y este Majestic 2 es que los estrategas nacionalistas han aprendido la lección, y trabajan concienzudamente para esconderlo. La política son imágenes, puro márketing. Y la foto deMasconAlicia Sánchez-Camachono es la del 96 porque CiU la evita a toda costa a pesar de la insistencia de la líder del PPC por inmortalizar las repetidas coincidencias políticas y apoyos parlamentarios. De la gran foto del 96 con cámara profesional y en blanco y negro a la dosificación de instantáneas de menor cualidad, como si de una antigua Polaroid se tratara.

MañanaMariano Rajoyrecibirá aMasen la Moncloa. La textura institucional del decorado, con llegada en coche oficial, banderas y encajada de manos en la escalinata del palacio presidencial difumina el acuerdo tácito que amagan ambos partidos. No se trata de un pacto CiU-PP sino de una entente cordial Barcelona-Madrid. Los responsables de comunicación de CiU trabajan fino. Han renovado el Majestic pero se han ahorrado la foto. Menos lastre electoral, pero acuerdo al fin y al cabo. Lástima que elcovetenga tan pocopeix.

Twitter: @saulgordillo