La reacción española

España reclama a la ONU su intervención

La ministra Trinidad Jiménez pide «calma y contención» a las dos partes

Policías antidistubrios vigilan una calle de El Aaiún en medio de un clima de tensión, ayer.

Policías antidistubrios vigilan una calle de El Aaiún en medio de un clima de tensión, ayer.

PILAR SANTOS
MADRID

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El estallido de violencia en el Sáhara sorprendió ayer a la ministra de Exteriores española, Trinidad Jiménez, de visita oficial en La Paz. Desde la capital boliviana, Jiménez reclamó la intervención urgente de las Naciones Unidas para intentar resolver el conflicto entre Marruecos y la excolonia española. Según el Ejecutivo, el desmantelamiento del campamento-protesta saharaui es un asunto de «trascendencia internacional» que España no puede tratar de manera bilateral con Marruecos.

La jefa de la diplomacia española declaró que el Consejo de Seguridad, que en estos momentos preside el Reino Unido, debería pronunciarse en cuanto tenga los informes de lo que ocurrió ayer en El Aaiún. Como integrante del Grupo de Países Amigos del Sáhara Occidental, Jiménez ofreció la ayuda de España para favorecer este diálogo, que ayer tenía como escenario Manhasset (cerca de Nueva York), donde saharauis y marroquís mantuvieron una reunión que ya estaba prevista.

«RELACIÓN PRIVILEGIADA» / En una rueda de prensa en La Paz, Jiménez pidió «calma y contención» a ambas partes, un mensaje en el que también incidió José Luis Rodríguez Zapatero en la reunión de la ejecutiva federal del PSOE,informa Juan Ruiz. Según varios miembros presentes, el presidente del Gobierno reclamó mantener «una relación equilibrada» con Marruecos, «un país puente con un interés estratégico» importante para España.

Según los dirigentes socialistas consultados, Elena Valenciano, secretaria de Política Internacional, añadió que, pese a esa relación privilegiada que Madrid quiere mantener con Rabat, no se tienen que dejar de señalar «las violaciones de los derechos humanos». En este sentido, el coordinador general de IU, Cayo Lara, consideró anoche «alucinante» que el Gobierno español no haya condenado el ataque del Ejército marroquí.

Lara hizo estas declaraciones frente a la Embajada de Marruecos en Madrid, donde unas 400 personas se manifestaron con consignas contra el reino alauí, como «Marruecos genocida», y gritos contra la actitud del Gobierno: «Sois amigos de los torturadores».

EXPLICACIÓN EN EL CONGRESO / La secretaria de Organización del PP, Dolores de Cospedal, pidió al Gobierno que auspicie las negociaciones entre Marruecos y el Frente Polisario «para que se pueda mantener la posición de España con relación al Sahara y la posibilidad de un referendo».

Cinco partidos del Congreso (ERC, IU, ICV, Nafarroa Bai y BNG) pidieron ayer la comparecencia de Zapatero para que explique la posición del Ejecutivo.