Los diputados instan a los saqueadores a tirar de la manta

Los comparecientes en la comisión de investigación del Parlament, salvo contadas excepciones, callan o mienten. Y, como estaba previsto, Fèlix Millet y Jordi Montull optaron por la primera de las opciones, lo que llevó a la mayoría de los grupos (todos menos CiU) a reprocharles que con su silencio mantengan viva la sospecha de financiación ilegal de Convergència. Los dos saqueadores del Palau de la Música, aconsejados por sus respectivos abogados, se acogieron a su derecho a no decir nada por encontrarse imputados en un proceso judicial. Como los diputados ya presuponían que Millet y Montull no abrirían la boca, optaron por censurar igualmente su actuación y les instaron a tirar de la manta para que confirmasen o desmintiesen que la institución fue durante años un instrumento de intermediación para el desvío irregular de fondos a las arcas convergentes.

Los grupos de izquierda, PPC y Ciutadans dieron por hecho que los dos ladrones confesos en realidad eran un eslabón más en la red de financiación de CDC. «Ustedes [Millet y Montull] se pensaban que el Palau era suyo, igual que otros [Convergència] se pensaban que el país era suyo]», afirmó el republicano Pere Bosch. El socialista Jordi Terrades lamentó que, al final, los únicos que aparecerán como culpables de todo serán los dos exgestores del Orfeó.

En una de las intervenciones más incisivas, el presidente de Ciutadans, Albert Rivera, ilustró de manera clara quién era Millet hasta que se destapó elcaso Palau: «A usted le hubiesen llamado para que el sábado fuese como invitado de honor a la manifestación. No tenga la menor duda, hubiera sido uno de los prohombres en aparecer al lado de [José] Montilla y [Artur] Mas, allá,fent país».

La comisión acordó que losexconsellersFelip Puig y Pere Macias comparezcan el martes y que el actual titular de Economia, Antoni Castells, sea el último en hacerlo, el día 19.