ANÁLISIS

Bienvenidas al futuro

Las jugadoras del Barça entrenan en el Camp Nou antes del clásico europeo con el Madrid.

Las jugadoras del Barça entrenan en el Camp Nou antes del clásico europeo con el Madrid. / FCBARCELONA

Sònia Gelmà

Sònia Gelmà

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Amenaza lluvia, dicen. El club se ha marcado el objetivo de que la asistencia al Camp Nou sea récord en un partido jugado por mujeres y ojalá sea así. El papel está repartido y ahora solo depende de los poseedores de esa entrada que acabará siendo histórica. Y si al final a algunos les da pereza coger el paraguas y se quedan en casa, tampoco pasará nada, porque la puerta ya estará abierta y tras este partido vendrán muchos más. 

Tendrán su oportunidad y su desafío será ofrecer un espectáculo que sea lo suficientemente atrayente para el público. Y sean cuantos quieran, bienvenidos serán

Y aunque el estadio no esté tan lleno como mañana, la asistencia será lo de menos, porque cada vez cuesta más llenar los estadios, que se lo digan al equipo de Xavi. Pero qué más dará los que sean, si vienen de jugar no hace tanto tiempo en el aparcamiento de tierra que había al lado del acceso 14. Qué más les dará si son unos pocos o muchos, porque una vez derrocado el muro, el mérito será de ellas. 

Tendrán su oportunidad y su desafío será ofrecer un espectáculo que sea lo suficientemente atrayente para el público. Y sean cuantos quieran, bienvenidos serán, porque nadie dijo que fuera fácil, y tampoco nadie lo espera. Pero lo que este miércoles será la excepción —mucho más que un partido— el día de mañana será una simple ronda de Champions que se jugará, por norma y no como concesión, en un estadio digno de la mejor competición. 

Y una vez más, esas niñas que desde que nacieron han sentido una atracción indescriptible por ese balón que ya no es de cuero, esas valientes –que afortunadamente cada vez necesitan serlo menos-- que desde hace unas temporadas sueñan con jugar algún día en el Barça, y desde Goteborg sueñan con ganar una Champions, también podrán imaginarse jugando algún día en el Camp Nou.

Y no será una fantasía en la cual recibirán un centro de Dembelé para rematar a gol. A partir de mañana, ya podrán soñar que quien centre el balón sea Hansen y que romperán la red con el dorsal 14 a la espalda porque se imaginarán siendo Aitana Bonmatí. Bienvenidas al futuro que se inaugura este miércoles en el Camp Nou. 

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