Un poquito de por favor

Voy a repetirlo por si el otro día no se me entendió lo suficientemente bien. No es el momento de que el Barça saque pecho. Ese “¡hemos vuelto!” se lo podrían haber ahorrado. De momento. Habrá un momento en que alguien pueda cantar el “sí se puede”. Llega el clásico y el Barça de Xavi Hernández aún no ha hecho un partido completo ¡ni uno! Seamos serios.

Ahora, lo siento mucho (o no), suena vacío, bobo y hasta innecesario que Joan Laporta, que aún no ha pagado un euro por Ferran Torres y, ni siquiera, lo ha podido inscribir (primer sapo que se ha tragado Mateu Alemany, que dijo que lo inscribiría antes del domingo), pretenda meter miedo al resto de equipos y ya no digo a los galácticos de verdad. En serio, lo de fichar a Erling Haaland lo archivaremos en la misma carpeta que la lona del Bernabéu, el fichaje de Beckham y la renovación “tras un asadito” de Messi ¿verdad?

El gran capitán

Tampoco creo que venga a cuento el paso de pecho que el siempre mediático Gerard Piqué, no lo olvidemos, capitán y santo y seña de este equipo, ídolo de la ‘gent blaugrana’ tras la salida de Messi, que no habla muy bien de él, ha hecho alrededor de sus ingresos. Primero: que enseñe el contrato e igual nos asustamos como nos asustamos cuando ‘El Mundo’ mostró el de Leo. Segundo: nadie se cree que gane la mitad de Ferran Torres, que ha venido (dicen) por 12 millones de euros por temporada. Tercero: lo que nos ha dejado ver, significa que gana 12.761 euros al día (limpios), es decir, más de lo que gana un mileurista (y los hay a millones) ¡al año! Podría taparse un poquito. Y cuarto, como dice la locución latina de origen medieval: “Excusatio non petita, accusatio manifiesta”. La traducción literal es “excusa no pedida, acusación manifiesta”.

Y yo, la verdad, que Laporta y Piqué se comporten así, mira, lo entiendo, es su ‘tarannà’, pero que Xavi se enganche a ese tren cuando tiene el techo de cristal, tan frágil como el del presidente y capitán, me parece raro. Porque, dentro de insuflar optimismo a la peña, decir que el Barça ha sido superior a todos los equipos con los que se ha enfrentado “menos al Bayern”, me parece de una sobradez innecesaria a estas alturas de la reconstrucción.

Siempre en apuros

Recuerdo las pifias de Dimata y RDT en el milagroso Barça-Espanyol (1-0), recuerdo la pifia (más que pifia) de Seferovic en el Barça-Bénfica (0-0), la victoria 1-3 en Villarreal donde el propio Xavi dijo que no merecían ganar, el baño final del Betis en el Camp Nou (0-1), el 2-2 de El Sadar donde el ‘mister’ elogio a los niños porque estaban salvando al equipo, el milagroso gol de Nico en el 3-2 ante el Elche, el 1-1 (contra 10) en el Sánchez Pizjuán y, para acabar, los dos paradones, en el añadido, de Ter Stegen para salvar el 0-1 de Mallorca y el 1-1 de esta anoche en Granada.

Repito, que Laporta y Piqué hagan y digan lo que les plazca (como es normal en ellos), pero Xavi debería ser más realista, aunque, ahora, forme parte del ‘camarote’ del ‘presi’.

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