Las "estupideces" de Bárcenas

La mujer de Luis Bárcenas ya está en prisión para cumplir una condena de más de 12 años. El Supremo confirmó que Rosalía Iglesias conocía perfectamente la procedencia delictiva del dinero que entraba en casa y los detalles sobre el incremento desmesurado del patrimonio. Siempre se dijo que el extesorero estaba dispuesto a hacer cualquier cosa para salvar a su esposa de la cárcel. Ese momento ha llegado y ahora, según 'El País’, Bárcenas estaría dispuesto a colaborar con la fiscalía en la causa sobre la caja b del PP. Veremos, porque en España siempre se ha hablado mucho de las mantas, pero los tirones suelen quedar en poca cosa.

Lo más sorprendente, en todo caso, ha sido la reacción de Génova. Dice la diputada Ana Vázquez, portavoz de Interior, que no les preocupa nada lo que pueda decir Bárcenas, porque “cuando una persona está condenada, comete muchas estupideces”. Ha añadido en TVE que si quería colaborar con la justicia, debería haberlo hecho “desde el principio”. Se trata de un discurso cínico hasta el extremo. Los que estábamos en Génova cuando estalló el escándalo recordamos bien lo que pasó. No solo por los deseos de Rajoy de que Bárcenas fuera fuerte, sino porque al extesorero le tuvieron a sueldo hasta mucho tiempo después. Y no supieron explicarlo ni en directo, ni en diferido. Por otro lado, no hay que perder de vista que hay otra causa judicial abierta por la presunta operación parapolicial que habría organizado la cúpula de Interior del PP para robarle documentación a Bárcenas. Es decir, que en Génova no parecían tener ninguna gana de que “Luis, sé fuerte” colaborase con la justicia. Ni al principio, ni al final. Y si eso era lo que en el fondo querían, lo disimularon bien. Además, si a Vázquez le parece positivo lo de colaborar con los jueces cuanto antes mejor, ¿por qué lo tilda al mismo tiempo de estupidez? Por último, según ella, Bárcenas no tiene nada que ver con Pablo Casado, “ni con el PP en general”. Hombre, más tendrá que ver con el PP que, no sé, con Izquierda Unida. Que un condenado cante, si dice la verdad, es buena cosa para casi todos. 

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