No en el mismo saco

Se judicializa la política cuando políticos ineptos buscan en los tribunales la respuesta que han sido incapaces de ofrecer con argumentos solventes y negociaciones responsables. Se politiza la justicia cuando las togas tratan de marcar la vida política de un país. Cuando ambos, jueces y políticos, por omisión o exceso, asumen papeles distintos a los encomendados se consigue lo que tenemos, sentencias con ánimo justiciero y sociedades con conflictos enquistados.

Tras la decisión del Supremo de vetar a Junqueras ser eurodiputado se intuye cierta ofuscación del tribunal. Por obstinación, pero también por un galimatías que enfrenta el derecho nacional al europeo. El líder de ERC aún tiene recorrido judicial para defenderse. Igual que el resto de personas vinculadas al independentismo que, por causas muy distintas, se enfrentan a la justicia. Todos ellos comparten una causa, pero no todos caben en el mismo saco. Algunos jugaron con fuego. Capítulo aparte merece Torra, quien desafió puerilmente algo tan básico como la imparcialidad de una institución en periodo electoral. Lo suyo no es represión, es tontería.