El tren de medianoche

Acabas de coger las vacaciones, estás con los últimos arreglos, preparando maletas. Quedan apenas 30 minutos para que aquél tren salga. Maldito. Sales de casa, corres hacia la estación y coges eltren que cambiará la vida de tantas personas. Suena la alarma de que se cierran las puertas, las deaquel maldito ferrocarril.

Durante el camino te pones los auriculares, y escuchas música, estás tranquilo, ansioso por llegar aCompostela, te espera mañana un gran día, el día del patrón, el día deGaliza. Miras con rabia el reloj, queda muy poco, dirías casi que la estación está ya casi en la vuelta de la esquina, y jamás pensaste que el viaje fuera a durar tanto, que se apagase la luz.

Llegó la curva, muy cerrada, estás aún con los auriculares puestos, miras por la ventana y caen gotas, el cielo ya llora, ves la señal, señala 80, pero no sientes que el maquinista vaya a esavelocidad, pero no imaginas que la tragedia está al caer.

El tren está apunto de coger la curva, piensas en lo poco que queda para que acabe el trayecto, un trayecto que duró tiempo. Elmaquinista cogió la curva y no salió.

No salió porque el ser humano es egoísta, piensa que ejecuta acciones que sólo le perjudicarán a él. Supuestamente el conductor de aquél tren de medianoche, triplicó la velocidad permitida en ese tramo, ese fatal tramo. Por el momento, debemos dejar las causas, debemos dejar que las investigaciones sigan su curso, y hemos de estar por las víctimas, familiares y amigos. Pero la responsabilidad debe estar siempre. Seamos responsables, las personas, son personas, no trenes, ni kilómetros por hora.

Gallegos, sean fuertes. Forza Galiza. Todos conGalicia.

@adria_gallardo/ adriagallardo.net