Perlas del papel

La grisura ideológica del rigor contable

La derecha mediática constata que el PP y CiU reinician la vieja amistad

La grisura ideológica del rigor contable_MEDIA_1

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XAVIER CAMPRECIÓS

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La realidad, ya se sabe, es tozuda. Y si la derecha política se reajunta --en un último quiebro CiU apoyó el ajuste anticrisis del PP pese a que sube impuestos, amenaza con asfixiar a Catalunya y amaga con armonizar la autonomía-, a la derecha mediática solo le queda saludarlo, le haga feliz o desgraciada. La Vanguardiadestilaba la felicidad de lo natural:La realidad impone la entente PP-CiU,titulaba su crónicaJordi Barbeta, mientras el editorial loaba«el rigor contable»y«la coherencia»deMas al apoyar aRajoyy, a la vez, perseguir una «solución justa para las finanzas catalanas»ante«la pretensión uniformadora que anida en el fondo ideológico del PP».

También lo consignabaEl Mundo (Portada: PP y CiU abren el camino para un pacto estable de apoyo mutuo. Editorial:PP y CiU, el reinicio de una vieja amistad).Aunque el resto delcazalla party -La Gaceta, La Razón y Abc- ni lo realzaba ni lo criticaba.

Acaso solo se tentaban la ropa, ya que como escribíaJosé María Izquierdo(elpaís.com),el matrimonio de conveniencia PP-CiU deja en la cuneta a quienes querían«exterminar el catalanismo irredento»y que el PP«pusiera las cosas, toros incluidos, en su sitio».Y tampoco se ha extinguido aún el espíritu regenerador que anida enAbc.Que una cosa es queManuel Martín Ferrandatinara a pronosticar que esta será la legislatura de«la grisura ideológica de la contabilidad presupuestaria» y que en el PP «empiezan a notarse cofradías de afectados por haber quedado compuestos y sin cargos»,y otra queEduardo Serra, exministro de Defensa, no volviera a proclamar ayer mismo la necesidad de simplificar y armonizar España.

Y ante ese frente madrileño,Xevi Xirgu (El Punt-Avui) abogaba por repensar«el sentido de Estado que a los catalanes -y en especial a los convergentes- les pilla en Madrid». A su vera,Vicent Sanchis remataba:«Hay que tener coraje a manta para votar esto (...) O el bolsillo vacío».