Los orígenes (I)

Cuando Bayona hacía temblar a la Escac: "Si algo no le gustaba, te lo decía y protestaba"

EL PERIÓDICO entrevista a varias figuras que han sido clave en la trayectoria del cineasta barcelonés, que este domingo aspira a que 'La sociedad de la nieve' se lleve dos estatuillas en los Premios Oscar

Los inicios de Bayona en el cine de Barcelona. Con Jaume Macià, jefe de estudios ESCAC

Vídeo: Juan Manuel Freire / Foto y Vídeo: Manu Mitru

Juan Manuel Freire

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Los padres de J. A. Bayona, verdaderos creyentes en sus hijos, se jugaron la economía familiar pagando religiosamente cada año el millón de pesetas que costaba cada curso de la ESCAC (Escola Superior de Cinema i Audiovisuals de Catalunya), según relataba el hermano gemelo Carlos en el libro “J. A. Bayona. De ‘El orfanato’ a ‘Jurassic World’ en solo una década”, de Laura Seoane y C. David Carrón. 

Jota entró a la escuela como un terremoto. Según se cuenta, en las pruebas de acceso desafió a los miembros del comité asegurando que haría cine o sin ellos. Entre los entrevistadores se encontraba el famoso director Paco Pérez-Dolz (“A tiro limpio”), quien al parecer quedó impresionado por los ‘storyboards’ que Bayona trajo hechos de casa. “Me lo han contado muchas veces”, dice Jaume Macià, actual jefe de estudios de la ESCAC. “Pérez-Dolz empezó a decir: ‘¡Este niño vale mucho, este niño hará cosas!’ El hombre era buen profeta”.

Macià tuvo a Bayona como alumno en una asignatura de primer curso, Dramaturgia, centrada en los argumentos universales, en cómo se han llevado al cine los argumentos literarios mitológicos. “Hizo un trabajo, que conservé hasta hace poco, sobre el hombre artificial, o Frankenstein en concreto”, recuerda. “Y el tío lo entregó en tapa dura, encuadernado… O sea, un trabajo de diez”.  

Recuerda al joven estudiante de cine como “un tío muy activo, que destacaba porque tenía muchas ganas de hacer cosas”. Y por no conformarse con cualquier clase de clase: “Si algo no le gustaba, te lo decía y protestaba. Le recuerdo en mi despacho [además de profesor, Macià era una especie de coordinador] quejándose de algún profesor que él creía que no estaba a la altura. Pero la actitud era positiva; está bien que alguien se queje si las cosas no funcionan”. 

Ya en aquellos días, Bayona perseguía el horizonte del cine espectáculo, algo no demasiado común entre un alumnado con sueños de nouvelle vague. ¿Apoya la ESCAC esta visión hollywoodiense del director? “Nosotros no somos de los que piensan que en las escuelas solo se tiene que hacer un cine de autor dirigido a una élite intelectual”, asegura Macià. “Es más, pensamos que esto es un error grave. Todo tipo de narración es muy digna e impulsamos un cine que pueda gustar a todo el espectro de la población”.  

Con la primera productora de la ESCAC, Escándalo Films, rodó Bayona su revelador corto “Mis vacaciones” (1999), y con otra productora de la escuela, Desastre de Cine, que llevaban Sergi Casamitjana y Aintza Serra, el corto “El hombre esponja” (2003) o notorios videoclips.

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